En jaque la libertad de prensa en Ecuador

Nueva York – La aplicación de leyes restrictivas, penales y administrativas en contra de periodistas y medios de comunicación en Ecuador no sólo viola el derecho a la libertad de expresión, sino que allana el camino a la impunidad, dijo ayer César Ricaurte, director ejecutivo de la Fundación Andina para la Observación y Estudio de Medios (Fundamedios).

Durante una conferencia de prensa realizada en esta ciudad previo a su participación ante la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos en Washington, Ricaurte expresó su preocupación por el incremento de las agresiones a periodistas en el país sudamericano.

Explicó que en lo que va del año, un total de 170 casos han sido documentados en contra de profesionales de la comunicación, situación que sobrepasa los 151 casos registrados en 2010.

Indicó que los agravios a periodistas se ha dado no sólo de parte del estado, sino también de gremios sindicales, asociaciones civiles, turbas e incluso narcotraficantes.

Sobre este último, Ricaurte dijo que existen datos creíbles sobre la presencia de miembros de los cárteles la droga de México y que han comenzado a amedrentar a los periodistas a fin de que no continúen su actividad.

Sobre la relación del gobierno de Rafael Correa con los medios, el director de Fundamedios dijo que ésta se encuentra en un momento de profunda crisis.

“Bajo el gobierno actual el estado de libertad de expresión se ha deteriorado considerablemente. Las agresiones por parte de funcionarios a los van en aumento y las denuncias de amenazas ha puesto en entredicho la libertad de información”.

Citó como ejemplo la demanda interpuesta contra el periodista Emilio Palacio y otros tres empleados del diario El Universo, quienes fueron demandados a raíz de la publicación de una columna, en la que cuestionaba la actitud del Correa en los hechos relacionados con el intento de golpe de estado el 30 de septiembre de 2010.

Al respecto, un juez condenó Palacio a tres años de cárcel y el pago de 40 millones de dólares por danos. Dicha situación obligó al periodista abandonar el país y solicitar refugio en los Estados Unidos.

“Podemos decir que la situación de los periodistas en Ecuador es grave porque lo que el gobierno está generando un mensaje en donde los medios y lo periodistas pueden pagar con cárcel y dinero por ejercer el periodismo”, dijo Ricaurte.

Hasta el cierre de esta edición, ni el consulado de Ecuador en Nueva York, ni su embajada en Washington habían respondido sobre el tema.

El director de Fundamedios agregó que si lo que Correa buscaba a través de su denuncia era resarcir su persona, “pues entonces hubiera aplicado el derecho a la réplica y el periódico estaba dispuesto a ceder sus páginas. Sin embargo eso no ocurrió y lo que se quiso hacer con esta demanda, fue amordazar a los medios y a los periodistas”.

Dicha situación, continuó Ricaurte, ha obligado a muchos profesionales de la comunicación a guardar silencio y hasta cierto punto tolerar los abusos de los funcionarios, so pena de ser enviados a la cárcel.

Por esa razón, continuó, “vamos a denunciar estos abusos ante la Comisión Interamericana de derechos humanos y vamos a exigir garantías para el ejercicio de nuestro derecho a informar en Ecuador”.