Entre ‘dos Jorges’
Tina D'Marco se muestra sorprendida de poder actuar al lado de George Clooney o para productores como George Lucas
George Lucas y George Clooney han marcado la vida profesional de Tina D’Marco.
La actriz de origen mexicano y nacida en el condado de San Diego hizo realidad algunas de sus metas al lado de estas dos conocidas celebridades.
“En 2010 trabajé con ‘los dos Jorges'”, dijo con gran sonrisa en la sala de su casa.
Con Clooney hizo un comercial para la televisión japonesa y Lucas la dirigió en Red Tails. Este filme se estrenó en enero en los cines de este país de manera limitada y a partir de mañana está disponible en DVD y Blu ray/DVD.
La hija única de un matrimonio de mexicanos, cuyo padre era líder de una orquesta, es una de tan solo dos mujeres que participaron en esta cinta basada en el grupo de pilotos afroamericanos que lucharon en la Segunda Guerra Mundial y en el que da vida a una italiana y madre de Sofía (Daniela Ruah).
“No creía que una muchacha tijuanense toda boba llegara hasta aquí”, dijo sobre sus logros.
Para la audición de esta película, recordó, hubo un alto número de mujeres, varias de ellas italianas reales, competiendo por el mismo papel y por eso no pensó que sería la elegida.
“Estudié italiano en Los Angeles City College y dije: ‘¡Oh, Dios mío! ¿Cómo le voy a hacer?’. Y además iba vestida como de los años 40”, comentó todavía sorprendida.
En la televisión, D’Marco actuó en Gilmore Girls y ha tenido participaciones especiales en los melodramas General Hospital, Days of Our Lives y un papel recurrente en The Mind of the Married Man.
En la pantalla grande ha sido parte de He Was a Quiet Man con Christian Slater, American Fusion como la mamá del personaje de Esai Morales y de las películas de terror Amhurst y Seance, entre otras.
En el teatro, género en el que descubrió su gusto por la actuación a los 15 años, la egresada de UCLA ha formado parte del elenco de obras como Real Women Have Curves, Blood Wedding y The Sound of Music, entre otras.
Con su nombre artístico y apariencia, aseguró, también ha logrado hacer papeles como el de jueza y no solo el de la típica sirvienta que usualmente, criticó, son dados a las latinas.
“El nombre de Marco es muy ambiguo. Me gusta que me vean que puedo hacer diferentes personajes. Tienen en Hollywood esa manía de encasillarte, y como que quieres quebrar esas cadenas”, dijo la histrión sobre su decisión de alterar su nombre tras crecer en la frontera californiana con México.
Para conseguir trabajo desde que se inició profesionalmente hasta ahora, comentó, “la lucha es todos los días”. Así que su carro se ha convertido en una especia de clóset en el que lleva los atuendos y accesorios necesarios para ir de una audición en otra.
“Siempre tomo clases. La actuación va cambiando y tienes que ir al mismo paso. Me he preparado para las escenas de acción. Sé bucear, esquiar y hasta paracaidismo. Todo por si se ofrece”, dijo demostrando la entrega que tiene hacia la difícil y competitiva profesión.
También ha hecho comerciales y grabaciones de voz en inglés y español para empresas como McDonald’s y Disneyland y ha sido entrenadora de voz durante los últimos 20 años de actores como Gabriel Soto y Jennifer Tilly.
Agregó que mientras tenga salud, seguirá trabajando a pesar de los obstáculos de su edad, que ya pasa de los 50, y de la falta de unión entre los actores latinos en la industria.
“Mientras yo tenga una oportunidad de ir a audiciones, he aprendido a gozar de la vida”, comentó la residente de Los Ángeles.
Y aunque para su mamá todavía no es una actriz consolidad por no haber salido en una telenovela, ella tiene sus prioridades establecidas. “Para mí las películas son más importantes”, recalcó.