Crean nuevo gimnasio para albergar a boxeadores de Houston
Héctor Rocha ha abierto en el Northside un nuevo gimnasio de boxeo que, pese a sus actuales carencias, es ya una opción para muchos jóvenes pugilistas de Houston
El entrenador de boxeo Héctor Rocha (izq.) abrió su propio gimnasio para seguir trabajando con la juventud. Crédito: Gustavo Rangel / RUMBO
HOUSTON – En una tarima de madera boxeadores hacen sombra y trabajan con las manoplas. Próximamente, la tarima tendrá una lona, postes y cuerdas para convertirse en un ring de boxeo y así poder comenzar las sesiones de sparring.
Es cierto, aún faltan muchas cosas en la pequeña bodega que pretende ser un gimnasio de boxeo, pero esta es la nueva casa de varios boxeadores que están dispuestos a lograr sus sueños sin importar las carencias.
Decenas de boxeadores se quedaron sin un lugar para entrenar cuando los dueños del Gimnasio Prince decidieron utilizar sus instalaciones para ayudar a una escuela alternativa del Quinto Barrio que necesitaba espacio para dar clases a niños desde kínder al tercer grado.
El entrenador Héctor Rocha, que llevaba 11 años trabajando en las instalaciones de Prince, se entristeció con la noticia pero entendió que los dueños de Prince hicieron lo correcto porque la educación debe ser la prioridad.
“Yo estoy muy agradecido con la gente de Prince porque han ayudado a muchos jóvenes y siguen haciéndolo, pero ahora me toca a mí hacer algo para ayudar a todos estos chavos que se quedaron sin un lugar donde entrenar”, dijo Rocha.
Con la ayuda de varios de sus exboxeadores y los padres de los alumnos que actualmente entrena, Rocha ha abierto su propio gimnasio en el barrio del Northside.
Dentro de una pequeña bodega que no cuenta con aire acondicionado y que apenas comienza a tener las cosas necesarias para poder entrenar a los boxeadores, Rocha y sus asistentes ya entrenan a los jóvenes buscando seguir con los proyectos que tenían cuando estaban en Prince.
“Mi sueño es producir un campeón del mundo, hace mucho años estuve muy cerca de conseguirlo pero no se me hizo y quiero lograrlo pronto porque el tiempo se me acaba”, agregó Rocha.
La pasión de Rocha por el boxeo es grande porque ha visto a través de los años que es un deporte que puede cambiarles la vida a los jóvenes y porque le ha dado grandes amigos que ahora le están echando la mano con su más nuevo proyecto.
Con la ayuda de alguno de sus exboxeadores el pequeño gimnasio ya tiene instaladas unas bolsas y peras y el ring está siendo construido por Alex Guevara y Agustín Rojas, que estuvieron entrenando con Rocha unos años atrás.
“El señor Rocha nos ayudó mucho cuando éramos jóvenes y ahora nos toca a nosotros poner nuestro granito de arena para ayudar a los nuevos talentos que esté entrenando el señor Rocha”, dijo Rojas.
Rocha tiene la ilusión de que su gimnasio se convierta en algo más que una alternativa al Gimnasio Prince.
“Nos falta mucho trabajo pero tenemos boxeadores muy talentosos que merecen que les demos un lugar para que puedan seguir luchando por sus sueños y vamos a esforzarnos a lo máximo para ofrecerles esa oportunidad”, comentó Rocha.
