Mala Rodríguez llega a EEUU con nuevas canciones
Actúa mañana en Los Ángeles donde presentará su nuevo álbum.
Después de debutar con una gira por todo el país en 2004, la rapera española Mala Rodríguez no regresó por estos parajes para hacer otra presentación.
Sin embargo su música siguió siendo escuchada en este país y, debido a ello, viajó en varias ocasiones solo para asistir a ceremonias de entregas de premios, entre ellas, la de Latin Grammy del año pasado, cuando se llevó el megáfono en la categoría de Mejor Canción Urbana por el disco Dirty Bailarina, una producción que dejó ver que La Mala, como también la nombran, no era tan mala y que además era muy sensual.
La intérprete de La niña -nacida hace 33 años en la ciudad española de Jerez de la Frontera, en Cádiz- está de gira por este país, y su parada en Los Ángeles es mañana. De su carrera -con seis álbums-, su maternidad y la crisis de su país habló con ¡holaLA!.
¿Cuándo fue tu última gira por este país?
No me acuerdo, pero hace tiempo que no vengo. Ya tenía muchas ganas de regresar.
¿Y qué tienes de nuevo?
Tengo muchas cosas que contar. Estoy trabajando con la formación de un Trío Eléctrico -un sistema de sonido de alto poder-, de origen brasileño, que permite la formación y combinación de la parte electrónica, las programaciones y los elementos orgánicos. Me gusta que la batería por ejemplo, esté ahí siguiéndome todo el tiempo, que si yo me vuelvo loca se vuelva loca conmigo, Voy a tocar temas de todos los discos desde Lujo Ibérico hasta las canciones de mi último álbum…
…Que es el nombre que le diste a la gira, ¿no? ‘Dirty Bailarina’
Sí, para mí, este último disco es donde he podido descubrir la parte más femenina de mi música, que era bastante masculina.
Con ese disco has logrado importantes reconocimientos, como un Latin Grammy.
Sinceramente no esperaba nada. Venir a la ceremonia fue maravilloso. Antes de la entrega comentaba con Gustavo Santaolalla que no tenía importancia si no ganaba. Pero cuando tienes [el premio]… Creo que es buen momento para dar las gracias a todo mundo. Nunca está de más.
Sin embargo fue un disco muy criticado en España. Los críticos señalaron tu cambio radical de “fierecilla deslenguada” a una chica refinada.
Saqué totalmente mi lado femenino, pero no quiere decir que me haya refinado. Simplemente saqué otra parte de mí. Creo que tengo una parte de mi vida que es bastante cruda [y] otra que es feliz. Yo soy de muchas maneras, aunque creo que todo mundo lo somos. Lo que pasa es que nos quedamos con lo que nos funciona, y como artista no puedo permitirme eso. Tengo que seguir buscando, examinarme y me siento bien sacando eso de mí.
¿A qué te refieres con lo del elemento femenino?
A lo receptivo. Que en vez de ser tan invasora o agresiva como en otras ocasiones, era darle un lugar a la reflexión, a darle la vuelta, a la transformación para escuchar otras voces que había en mí y que no las había escuchado, como la sensualidad que es muy bonita y no la había disfrutado como hasta ahora.
La maternidad también cambia
Sí, yo soy madre desde hace rato, antes de hacer malabarismos, y decía: “ahora soy más fuerte que nunca porque ahora puedo comerme una rata viva si es necesario por mis hijos”.
¿Estás preparando algo nuevo?
Antes de que termine el año entraré al estudio. Tengo muchos temas preparados, he estado componiendo desde hace año y medio.
¿En algún tema reflejarás la crisis económica de tu país?
Desde hace mucho tiempo lo había dicho. Pero ahora la bomba ya explotó y, ¿qué hay qué hacer cuando todo ha quedado en ruinas? Pues ahora vamos a darle importancia a los valores de verdad, porque hay muchos socioeconómicos pero no humanos y de eso estoy hablando.