Inquilinos protestan por mal estado de edificios
A pesar de haber realizado las denuncias en la corte no ha tenido resultados.
Brooklyn – Mientras sube las escaleras del 553 de la calle 46 de Sunset Park, Carlos Villón muestra la suciedad de los pasillos, las losas rotas y la cerradura inexistente de la salida de emergencia. En su vivienda del cuarto piso, este ecuatoriano de 73 años señala por dónde el agua se filtra en las paredes y ventanas, así como el metal roído de su viejo lavaplatos.
En sus tres décadas en esta residencia, el peor daño ha sido el asma crónica que él, su esposa e hija sufren por aspirar el polvillo de los techos desgastados. Villón fue uno de los arrendatarios de los edificios 545, 553 y 557 de la calle 46 que ayer protestaron contra el deterioro de sus residencias.
“Hace dos años puse la queja a la ciudad y sólo así el propietario reparó el techo, pero ya era tarde porque ahora debo usar una máquina para respirar”, comentó. El pobre mantenimiento es un mal crónico que las 260 personas que habitan estos 51 apartamentos han sufrido por más de 28 años.
Sara López, de 64, residente del sitio por 40 años, explicó que el dueño – Orazio Petito, de Peto Management – ha sido negligente en cumplir normas básicas de seguridad. “No responde a nuestras cartas y llamadas”, dijo la hondureña que lidera el grupo de manifestantes apoyado por organizaciones locales como Occupy Sunset Park.
Entre los problemas denunciados a la línea 311 están cableado inseguro, apagones frecuentes, contaminación por plomo, hongos y humedad, acumulación de basura, deterioro de escaleras de incendio y control ineficaz de pestes.
También han solicitado reparaciones al Departamento de Vivienda de la ciudad de Nueva York (HPD) y solicitado la intervención de la Comisaría 72 y el Departamento de Bomberos.
El incidente más reciente fue un apagón de nueve horas hace dos semanas. “Los bomberos dijeron que el cableado y los fusibles estaban sobrecargados”. Según López, estas fallas debieron repararse en 16 días, pero aún no se han solucionado.
A los inquilinos les preocupa por igual es el mal manejo de la basura, que atrae alimañas como ratas y cucarachas. “Yo vivo en el primer piso, bajo toneladas de basuras que acumulan sin razón alguna; por eso fui a la corte pero nada ha cambiado”.
Como muchos de sus vecinos, la ecuatoriana Sue Trelles lleva diez meses sin pagar la renta como protesta por la situación y porque su contrato de arrendamiento no ha sido renovado. “Yo he pagado reparaciones en mi vivienda que son responsabilidad del propietario”, dice. “Sólo este año llevo ya más de $500 invertidos en arreglar un bote de agua, un lavamanos inservible y la pintura”, añade vive allí hace 28 años.
En los edificios viven muchos niños y personas mayores, incluso una invidente y otra minusválida. “Casi todas las noches hay apagones y hasta los buzones de correo están deteriorados”.
También muchas cerraduras principales no funcionan. “Hace tres semanas asaltaron a un vecino en el edificio, pero es ilegal no hizo la denuncia”.
El dueño de los edificios no respondió las llamadas que se le hicieron. El grupo también reclamó la falta de apoyo de la concejal Sara González o del asambleísta Vito López. Al cierre de la protesta, marcharon hasta las oficinas de estos representantes en Sunset Park, pero no los encontraron.