La Víbora

Podría parecer una desfachatez de Colate, pero no creo que lo sea tanto. El exesposo de Paulina Rubio se acostumbró a vivir bien y sin mover un dedo a costillas de ella… y eso es culpa de Pau, que se lo permitió estando casados. Nicolás “Colate” Vallejo se paseaba con ella por todos lados, y dicen que por capricho de Pau, que no quería dejarlo ni a sol ni sombra.

Claro que al divorciarse no iba a incomodarse y tomarse la molestia de buscar un empleo. Por eso hizo peticiones desorbitantes a la cantante, lo cual estuvo negando, y, molesto, dijo a los medios que no estaba pidiendo cinco millones a cambio de la custodia de su hijo Andreaa. ¡No pidió cinco, pero sí un millón!. Al final se conformó con 243 mil dólares que le serán entregados en el transcurso de tres años, en un acuerdo que parece ser se arregló fuera de corte.

Susana Dosamantes, la mamá de La Chica Dorada, escribió en su Twitter: “Cuando se puede comprar la paz, cómprenla, ¡no tiene precio!”, y claro se ha quitado una lacra de encima.

Pero a ver si así Pau aprende a no ser tan egocéntrica, posesiva, caprichosa y andar con cualquier piojo. No es la primera mujer a la que le toca mantener a sus exparejas: la difunta Jenni Rivera, también tuvo que mantener a su ex, quien murió en la prisión pagando una pena que lo acusaba de varios delitos.

Presten atención: desde ahora me gustaría que me llamen diva, sí diva, con eso de que todas las artistas se sienten como tal. ¿Por qué yo no? Resulta que Thalía ha anunciado su regreso a los escenarios y a su gira la ha nombrado Diva. ¿Y qué tiene de diva?

Pero bueno, lo válido es que Thalis ahora sí sabe cantar y espero que nos demuestre —para que nos deje a todos con la boquita cerrada— que es merecedora de la estrella que le darán en el Paseo de la Fama en Hollywood en un par de semanas y que es mentira que se la compró su maridín Tommy Mottola, aunque dicen que las estrellas no se venden, sino que se la ganan los artistas que han ganado reconocidos premios, que realizan conciertos por todos lados. Pero que yo sepa Thalía tiene como diez años sin dar conciertos y sus dos últimos discos no han ganado ni siquiera un Latin Grammy. Es más ni nominados han estado en estos premios.

Y que onda con… con la madre de Héctor “Macho” Camacho, María Matía? Esa mujer que —muy respetable su dolor de madre por la pérdida de su hijo— pero ha hecho de eso un verdadero circo. Ahora resulta que ha quedado como la bruja malvada del cuento y… ¡una ¡mentirosa!. Primero dijo que no había empeñado la cadena famosa del exboxeador y ahora resulta que sí, que dizque para ponerle lápida a la tumba, lo cual tampoco ha hecho y acaba de decir que mejor se quiere morir. Lo que mejor debería hacer es ir con un psicólogo para ver si todavía tiene arreglo.