Todo listo en el AT&T Park para semis del Clásico
Sabor caribeño, Holanda sorpresa y Japón de bicampeón defensor son los elementos para las semifinales del Clásico Mundial de Beisbol que lleva sus semifinales a San Francisco.
San Francisco (EEUU).- Todo está listo en el AT&T Park, de San Francisco, para iniciar mañana, domingo, las semifinales del III Clásico Mundial de Béisbol, que tendrán un gran sabor caribeño al clasificar República Dominicana y Puerto Rico, la sorpresa de Holanda y Japón de bicampeón.
Al margen de lo que puedan deparar los partidos de semifinales, nadie cuestiona el gran triunfo que han conseguido ya en esta edición el béisbol latinoamericano, que podría haber sido completo si Cuba no hubiese quedado eliminada por Holanda, la novena que hizo historia al ser la primera europea que lucha por el título.
Precisamente, Holanda será la que protagonice con República Dominicana el partido que se espera con más interés no sólo porque definirá al segundo finalista del torneo sino porque tendrá también el factor de “venganza” deportiva después que ambas novenas se enfrentaron en la primera ronda de la edición del 2009 y generó otra sorpresa al dejar eliminado el equipo nacional quisqueyano.
Eso no preocupa para nada al manejador de Holanda, Hensley Meulens, que está en su ambiente dado que es el entrenador de pitcheo de los Gigantes de San Francisco, los actuales campeones de la Serie Mundial.
“No nos preocupa el rival, le respetamos, pero tampoco nos conformamos con haber llegada a las semifinales queremos más porque podemos competir con cualquiera”, comentó Meulens. “Sabemos que Dominicana no es el mismo equipo del 2009, no tiene puntos débiles y tendremos que hacer el mejor juego para ganar”.
Meulens conoce muy bien el poder de los bateadores de Dominicana que encabeza el segunda base Robinson Canó, ganador del premio de Jugador Más Valioso (MVP) de la segunda ronda disputada en Miami.
Aunque el piloto de Dominicana, Tony Peña, que llega invicta (6-0) frente a Holanda, tampoco quiere hablar del pasado, ni los peloteros quisqueyanos, la realidad es que el duelo promete emociones e intensidad en el campo.
“Son un gran equipo porque cuentan con más peloteros de las Ligas Mayores que nosotros, lo que significa que no podemos cometer errores ante profesionales que saben como aprovecharlos”, admitió Meulens. “Debemos buscar la perfección en nuestro juego y como es lógico el pitcheo será crucial, dejando la bola bajita, aprovechar nuestra defensa”.
Holanda llega a las semifinales descansada y preparada con dos partidos de exhibición en la Liga del Cactus que disputó en Arizona antes de viajar a San Francisco, además de haber incorporado a dos jóvenes valores como son el jugador de cuadro Jurickson Profar, el súper cotizado prospecto de los Vigilantes de Texas, que ocupará el puesto del lesionado Yunel De Caster.
La incorporación de Profar permite a Meulens tener un gran cuadro interior formidable con Andrelton Simmons (Atlanta), Xander Bogaerts (Boston-Medias Rojas) y Jonathan Schoop (Baltimore).
Los jardines están cubiertos por tres peloteros rápidos como son Roger Bernadina, Kalian Sams y Randolph Odober, más el veterano y líder Andruw Jones.
Diegomar Markwell se perfila como el abridor para la semifinal ante Dominicana y el bullpen reciben el apoyo del relevista de los Dodgers Kenley Jansen que también se une a Holanda para ayudarle desde el montículo.
Mientras que Dominicana llegará al partido con el abridor estelar, el derecho Edinson Vólquez, de los Padres de San Diego, que ha ido de menos a más.
Por primera vez en la historia del béisbol holandés las acciones del equipo nacional están cubriendo en directo los partidos, en medio de la liga de fútbol, algo inédito en la historia deportiva del país europeo.
Pero si Holanda está llena de optimismo, mayor es el que traen a San Francisco, República Dominicana y Puerto Rico, que quieren reivindicar para el béisbol caribeño y latinoamericano que la buena pelota se juega de este lado del mundo.
Aunque llegan con cierta desventaja por haber tenido competición hasta el sábado, en Miami, donde eliminaron a Italia y Estados Unidos, tanto Peña como Edwin Rodríguez, el manejador de Puerto Rico, tienen la esperanza de que ambas novenas protagonicen una final del Clásico Mundial con auténtico sabor caribeño.
“Tengo que aplaudir eso, tres equipos del área del Caribe en la final”, elogió Peña, que incluyó a la mayoría de los peloteros de Aruba, Curazao y Antillas Holandesas que juegan con la novena europea.
Mientras que Rodríguez no tuvo problemas en admitir que “el béisbol sigue siendo de esta parte del mundo, aun cuando Japón ha ganado las dos primeras ediciones y por lo tanto espero que ese juego decisivo sea entre Dominicana y Puerto Rico”.
Para que eso suceda, mañana, domingo, Puerto Rico con el abridor Mario Santiago tendrá que seguir jugando su mejor béisbol, el mismo que le permitió hacer historia con sus primeras semifinales del Clásico.
“Somos conscientes que son los actuales bicampeones defensores por un motivo”, subrayó Rodríguez. “Hay que tratar de jugar el partido perfecto y con esa mentalidad saldremos al campo”.