En el Mes de la Mujer, miremos hacia el futuro
Marzo es el Mes de la Historia de la Mujer, un momento del año en el que podemos agradecer a las muchas latinas que han mejorado nuestras vidas. Latinas como Helen Rodríguez-Trías, mi héroe personal, que luchó contra el racismo y el sexismo. Su trabajo en pos de la ampliación de los servicios de salud pública para las mujeres y los niños de bajos ingresos, incluyendo a nuestra comunidad, fue tan sustancial que fue galardonada con la Medalla Presidencial de los Ciudadanos, el segundo premio más importante en los Estados Unidos otorgado a civiles.
A lo largo de mi experiencia educando a nuestra comunidad acerca de la salud sexual, he pensado muchas veces cómo podría honrar el legado de las latinas como Rodríguez-Trías. Creo que la mejor manera de hacerlo es empoderando a las jóvenes latinas para que estén saludables y así puedan crear sus propios futuros prometedores.
La salud sexual es fundamental para ayudarles a construir esos futuros prometedores. En la actualidad, las latinas de Nueva York tienen tasas mucho más altas de embarazos no planeados que las mujeres blancas, y se enfrentan a mayores tasas de personas sin seguro médico, lo que hace más difícil acceder a los servicios de atención reproductiva.
En primer lugar, tenemos que empezar a hablar honestamente con ellas acerca de la sexualidad saludable. Los adolescentes que reportan tener buenas conversaciones con sus padres acerca de sexo son más propensos a retrasar la actividad sexual, tienen menos parejas y utilizan anticonceptivos cuando se vuelven sexualmente activos.
Para atender las necesidades en salud reproductiva de las jóvenes latinas de manera integral debemos elevar nuestras voces en favor de programas que promuevan la planificación familiar y los servicios de salud.
Esto significa pedir que se implementen programas que reduzcan al mínimo las barreras que enfrentan en la vida real, como la pobreza, el acceso limitado a la atención médica y la desigualdad de oportunidades educativas. Nuestra comunidad también debe apoyar aquellos programas que reducen el embarazo adolescente.
Deberíamos a empoderarlas con el conocimiento de que pueden hacer una cita para adquirir anticoncepción de emergencia, realizarse pruebas de embarazo, recibir consejería, hacerse la prueba de VIH/SIDA, o un aborto.
Este año, el gobernador Andrew Cuomo presentó una serie de objetivos políticos, la Agenda de la Igualdad de la Mujer. La agenda ataca defectos críticos que existen en la ley de aborto vigente en Nueva York, tira abajo las barreras que impiden la participación plena de las mujeres en la sociedad y promueve la salud y el bienestar de la mujer.
En la actualidad, a lo largo de Nueva York, las mujeres jóvenes que siguen los pasos de Rodríguez-Trías están creciendo, y buscando oportunidades que les ayudarán a promover sus futuros. Apoyemos a estas mujeres jóvenes, proporcionándoles la información y las políticas públicas que les ayuden a tomar decisiones saludables. Mediante la creación de oportunidades para la próxima generación de latinas, honramos a las latinas que han allanado el camino para nosotras.