Felipe I jurará como nuevo rey de Bélgica durante fiesta nacional
Felipe, 53 años, está casado con Matilde, hija del conde Patrick d'Udekem d'Acoz, con quien tiene cinco hijos: Elisabeth, la nueva heredera de la Corona, Gabriel, Emmanuel, y Elénonore.
Bruselas, Bélgica.- Felipe de Bélgica asumirá el trono del país mañana domingo, día de la fiesta nacional, cuando se hará efectiva la abdicación de su padre, Alberto II, tras 20 años de reinado.
Descrito como un hombre serio y reservado, Felipe, 53 años, está casado con Matilde, hija del conde Patrick d’Udekem d’Acoz, con quien tiene cinco hijos: Elisabeth, la nueva heredera de la Corona, Gabriel, Emmanuel, y Elénonore.
Pese a las dudas que suscita sobre sus capacidades como monarca, sobre todo entre la población flamenca del norte del país, ha sido educado para reinar por su tío, el fallecido rey Balduino, quien no tenía descendencia.
Se graduó en la Escuela Real Militar de Bélgica y en la Escuela de aviación de Gosencout, en la que recibió el título de piloto de aviones a reacción, antes de integrar el cuerpo de paracaidistas como instructor de reclutas jóvenes.
Felipe también es titular de una licencia en Ciencias Políticas obtenida en la Escuela de Posgrado de la Universidad de Stanford (Estados Unidos), a la que acudió tras haber concluido sus estudios universitarios en el Trinity College de la Universidad de Oxford (Reino Unido).
No obstante, queda por ver si su largo currículum académico y militar le ayudará a gestionar correctamente la nueva crisis política que puede surgir en el país con las elecciones de mayo de 2014, en las que los sondeos pronostican un nuevo avance de los nacionalistas flamencos.
Durante la última crisis del tipo -la mayor de la historia del país, que pasó un año y medio sin un Ejecutivo-, el papel de Alberto II como mediador ha sido considerado crucial para la formación del gobierno.
A los 78 años, el monarca afirma ahora estar demasiado cansado y con una salud debilitada como para seguir reinando y hacer frente a más un embrollo político.
Es hora, según sus palabras, de pasar el relieve a la nueva generación.
Los actos de traspaso de la Corona empezarán por la mañana del domingo con la tradicional misa ‘Te Deum’ en la catedral de San Miguel y Santa Gúdula, en Bruselas.
Alberto II presentará su renuncia en una ceremonia celebrada enseguida, tras la cual el príncipe heredero jurará como séptimo rey de los belgas delante de los representantes de las dos Cámaras, en el Parlamento Federal, y se convertirá en Felipe I.
Asumiendo el comando de las celebraciones del Día Nacional, será el nuevo rey quien rendirá homenaje al soldado desconocido y pasará revista a los 1.5 mil efectivos y 400 veteranos del Ejército que desfilarán en la Plaza del Palacio, encabezados por la guardia real.
La fiesta destacará las tropas belgas desplegadas en Mali y los veteranos de la guerra de Corea, en la que murieron 101 soldados enviados por Bélgica.
También participarán efectivos desplegados en Afganistán, Líbano y otros países africanos, así como 80 soldados de diversas nacionalidades que integran la fuerza europea Eurocorps.
Los belgas se despedirán de Alberto II con un espectáculo de fuegos artificiales y un espectáculo multimedia que proyectará sobre el Palacio de la Academia un video sobre la trayectoria del monarca y la vida de su hijo, el nuevo rey Felipe I.