No es facil agradecer
No. No es fácil agradecer cuando ha pasado un año más sin reforma migratoria.
Seguimos a la espera de una ley que beneficie a 11 millones de indocumentados. Nos sentimos aún defraudados y sin la necesidad de decir: “Gracias Señor Presidente”. Y es que si bien hubo una propuesta hecha por ocho senadores y después aprobada por la Cámara Alta, el empuje de la reforma se ha debilitado de tal forma que ahora se espera la aprobación de la ley en seis partes.
Y ante la cerrazón de la clase política que ni por razones económicas (ya no hablemos de las humanitarias) impulsan la medida, queda la lucha de activistas, de los Dreamers, empresarios y de algunos legisladores que mantienen la esperanza de lograr la reforma migratoria.
Valoramos su lucha, y es a ellos a quienes les agradecemos.
Y por si fuera poco. Mucho de lo avanzado en la administración de Barack Obama ha sido la reforma de salud. En medio de la discusión del cierre del gobierno salta a la vista la estrategia republicana de tumbar o al menos de atrasar el llamado Obamacare.
A pesar de todas las críticas y a riesgo de que bajara su popularidad, el Presidente ha mantenido la ley prácticamente intacta. Pero aún falta que el website funcione, que el mercado de salud opere y que las reformas que benefician a los latinos realmente se cumplan para todos a fin de que podamos dar un gracias completo.
No dejamos de reconocer que bajo la etiqueta #LoveIsLove el Mandatario mostró el apoyo al respeto por los derechos de todos los ciudadanos sin importar su inclinación sexual.
La comunidad gay ganó dos batallas importantes. En junio, la Corte Suprema de Estados Unidos declaró inconstitucional una previsión clave de la Ley de Defensa del Matrimonio y falló que una pareja del mismo sexo legalmente casada en un estado debe de recibir beneficios federales.
No es un valor menor lograr la paz en regiones como Siria e Irán. El mandatario evitó enviar tropas en el conflicto en Siria y estamos haciendo progresos con Irán firmando un acuerdo, por seis meses, para frenar el desarrollo del programa nuclear de Teherán, a cambio de levantar algunas sanciones.
Sin embargo, ha pasado un año más. Y no es este un tono lastimero. Es un llamado urgente a que se tome en serio a la comunidad latina que dio su voto electoral y de confianza al mandatario. Queremos que nuestra comunidad no viva separada, deportada, vejada.
Queremos poder dar un gran Gracias a los legisladores del país en el que optamos vivir es la mejor manera en que ellos pueden agradecer el voto que les prestamos bajo sus promesas.