El juego limpio dentro y fuera del deporte es el legado de Hausleber
El medallista de plata en Barcelona 92, Carlos Mercenario, habló de quien fue su entrenador y resaltó sus grandes virtudes, mismas que le reservaron un lugar entre los inmortales del deporte olímpico mundial.
Hausleber fue un ferviente creyente en la fuerza, fortaleza y competitividad de los deportistas mexicanos. Crédito: Notimex
México.- Para el ex marchista Carlos Mercenario Carbajal, el gran legado que deja el entrenador polaco Jerzy Hausleber es el del juego limpio, “no sólo en las competencias, sino en la vida misma, te inculcaba el juego limpio dentro y fuera de las pistas de atletismo”.
En entrevista el ahora director del Instituto del Deporte del Municipio de Naucalpan, Estado de México, añadió, “hoy en día tenemos esas enseñanzas que nos dejó no sólo como entrenador sino como persona que nos enseñó a ser gente de bien, a ser competitivos no sólo en los deportivo si no en nuestras actividades diarias”.
Indicó que Hausleber siempre fue un ferviente creyente en la fuerza, fortaleza y competitividad de los deportistas mexicanos, “pero sobre todo en su espíritu de lucha y él siempre conseguía que los sacaras cuando más lo necesitabas y así triunfar en cualquier lugar donde te presentaras”.
Señaló que si bien es importante competir y buscar ganar medallas o títulos, “también lo es el hecho de no vencerte, no darte por vencido aunque las circunstancias alrededor de ti estén totalmente en contra y esto no sólo lo aplicamos en el deporte sino en todos nuestros aspectos en la vida”.
“Será muy difícil llenar esos zapatos tan grandes que deja, pues tuvo a su cargo una generación dorada de marchistas, pero creo que hay dos entrenadores que supieron asimilar los métodos de trabajo del profesor Hausleber, José Alvarado, quien hizo de Guatemala una potencia en caminata”.
“Y Pedro Aroche, quien también ha sido mentor de varios andarines que han brillado a nivel internacional”, aseguró.
Al hablar sobre alguna anécdota que pudiera mostrar lo que era el profesor Hausleber, Mercenario Carbajal contó, “en una ocasión estábamos de campamento en Bolivia previo a ir a Juegos Olímpicos, no recuerdo cuáles y vimos la inauguración por televisión”.
“Le preguntamos por qué no estábamos allá y nos respondió con un convincente argumento: ¿qué es lo que quieren, estar en la inauguración o subir al podio?”
Finalmente, el ganador de la medalla de plata en los 50 kilómetros en los Juegos Olímpicos de Barcelona 92, definió al que fue su entrenador como una persona que supo cómo manejar a un grupo de atletas rebeldes.
“Siempre tuvo una broma o un consejo para cada ocasión y sabía exactamente cómo motivar a cada uno de sus marchistas para que dieran lo mejor de sí en cada entrenamiento y competencia”, expresó.
