Exoneran a agente que mató amigo de acusado de atentado en Boston
El agente no enfrentará cargos criminales, porque la Fiscalía determinó que disparó su arma en defensa propia
Orlando.- El agente del FBI que mató en mayo de 2013 al checheno Ibragim Todashev, amigo del principal sospechoso de los atentados de ese año en la maratón de Boston, no enfrentará cargos criminales. La Fiscalía determinó que el agente disparó su arma en defensa propia.
Según los documentos de la investigación, Todashev, de 27 años, murió en un interrogatorio en su domicilio tras iniciar una pelea con el agente y recibir siete disparos, varios de ellos en su cabeza y espalda.
De acuerdo con la información divulgada entonces por el FBI, Todashev era amigo de Tamerlan Tsarnaev, principal sospechoso de los atentados de la Maratón de Boston, en abril de 2013, y quien murió en un enfrentamiento con la policía tras la acción terrorista. Su hermano Dzhokhar Tsarnaev fue detenido tras los atentados, en los que tres personas murieron y más de 250 resultaron heridas.
Un mes después del ataque, oficiales de la policía estatal de Massachusetts viajaron a Orlando, junto al agente especial del FBI, con la intención de interrogar a Todashev. Antes de encontrarse con el checheno, los agentes “se familiarizaron con algo de su historial personal”, y tenían conocimientos de sus habilidades en las artes marciales, así como de su participación en un incidente en el que el hombre demostró sus destrezas de buen peleador, “al enfrentarse a dos oponentes durante un incidente de tránsito”, ocurrido en Orlando meses antes del interrogatorio.
También sabían que Todashev había cooperado con las investigaciones llevadas a cabo por un agente de una fuerza conjunta y que se había sometido “voluntariamente” a interrogatorios con los oficiales.
No obstante, según las autoridades, el día del incidente Todashev no estaba dispuesto a cooperar y pidió reunirse con los agentes en su residencia. “Los agentes sopesaron los potenciales beneficios que obtendría de una reunión, contra la inseguridad del ambiente, y accedieron a reunirse con él en su residencia”, según documentos de la investigación, dirigida por el fiscal Jeffrey Ashton.
Tras unas cuatro horas de interrogatorio, Todashev habría admitido parte de su culpa en un triple asesinato hacía años y se disponía a hacer una declaración escrita, cuando, de acuerdo con la versión oficial, inesperadamente atacó a los agentes. “Se escucharon ruidos como que rebuscaba entre cosas”, para luego caminar hacia los oficiales en un movimiento de ataque y armado de un palo al que cargaba en forma de “jabalina”, dice el documento de la fiscalía.
“Todashev avanzó hacia los oficiales y el agente especial del FBI disparó tres o cuatro disparos. Impactado por las balas, Todashev cayó de rodillas pero no quedó incapacitado”, señala el reporte de la investigación. “Él inmediatamente saltó hacia los oficiales. El agente especial del FBI disparó otra racha de tres o cuatro disparos que resultaron en la muerte de Todashev”.
Según afirma en su carta el fiscal Ashton, pese a que en un principio se sintió incómodo al conocer que Todashev había sido herido por la espalda, descartó de inmediato su preocupación. “Es siempre traicionero llegar a una conclusión del ángulo de entrada preciso de cualquier herida de bala”, dijo, y tanto la evidencia física como la documentación de la autopsia concuerdan con las declaraciones de los oficiales, únicos testigos oculares del hecho.
Ashton también afirma en su conclusión que tomó la decisión de no presentar cargos criminales contra el agente del FBI basado únicamente en la premisa de si un agente de la ley debería o no ser imputado de cargos criminales si este “razonablemente piensa que el uso de fuerza (mortal) fue necesario para prevenir la muerte o daño inminente a su persona u otros“.
El fiscal concluyó que al disparar mortalmente a Todashev, el agente especial del FBI no actuó con malicia ni manifestó una mala conducta y que utilizó fuerza mortal para defenderse a sí mismo y a otros.
A juicio del fiscal, Todashev “simplemente no tenía nada de vencido” y “decidió caer peleando”, concluye el fiscal.