Iluminación: la mejor para tu espacio
La iluminación va más allá de un bombillo.
Jugar con tu luz puede hacer toda la diferencia en tus espacios. Crédito: Tamara Roth
Si quieres crear un mood romántico prende una vela. ¿Leer en tu silla favorita? Necesitarás la luz correcta de la lámpara más cercana. It’s all about the right light para crear la atmósfera, definir los espacios y realzar tus accesorios.
Cada una de nosotras disfruta de un tipo de luz distinta. Un fan de techo con luz y andando es una migraña segura para mí, para ti tal vez una luz muy tenue te canse la vista. Es importante que reconozcas la función del espacio, los puntos focales, los colores (los oscuros absorben luz y los claros la reflejan) y busques la iluminación que te haga sentir más cómoda.
- General: viene de una lámpara de techo o de varios apliques en la pared. La cantidad de luz es la que se recomienda para realizar las actividades diarias. Se recomienda un switch con regulador de luz para variar la intensidad y darle un ambiente más acogedor al salón en las noches.
- Trabajo: Es la indicada para iluminar espacios de trabajo específicos, como un escritorio o la cocina.
- Acento: Le da importancia a tus piezas favoritas. Debe ser tres veces por encima del nivel de tu luz general.
- Halógeno: Proporciona luz blanca y brillante. Son bombillos más caros que los incandescentes aunque más duraderos. Pueden ser regulados y son eficientes.
- Incandescentes: Económicos y disponibles en diferentes formas y tamaños. Se funden relativamente más rápido y no ahorran energía.
- Fluorescentes: Los encuentras en tubos largos y bombillos compactos. Los fluorescentes duran 10 veces más que los incandescentes. No transmiten calor pero no pueden ser regulados.
El éxito de la iluminación está en integrar de los tres tipos de luz. Si tu espacio tiene materiales cálidos como madera los incandescentes con tonos amarillos funcionan muy bien. Si los tonos de tu decoración son azules o grises los halógenos son ideales, reflejan los colores más auténticos a la luz de día.
Para ahorrar energía te recomiendo los fluorescentes especialmente en áreas donde tiendes a dejar las luces encendidas como los pasillos y cocinas.
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