A-Rod abrió la boca ante la DEA
A cambio de inmunidad, el pelotero declaró ante autoridades federales que compraba las drogas en la clínica Biogenesis
Alex Rodríguez lo dijo todo.
A pesar de que por 21 meses sostuvo que era víctima de una cacería de brujas y que nunca había tomado esteroides de una clínica para combatir el envejecimiento, Rodríguez finalmente le dijo la verdad a alguien.
El antesalista de origen dominicano confesó en enero ante autoridades federales que usó sustancias prohibidas para mejorar el rendimiento y que las compró en la clínica Biogenesis, que era propiedad del falso doctor Anthony Bosch, de acuerdo a un reporte del Miami Herald.
La publicación indica que el Cacique se reunió con agentes de la Agencia Federal Anti-Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) en enero y llegó a un acuerdo para cooperar con ellos a cambio de inmunidad, firmando un acuerdo que lo protegía de ser enjuiciado si proporcionaba información fidedigna.
Y pensar que Rodríguez amenazó con llevar el caso a instancias federales mientras mantenía que él en ningún momento había consumido esteroides.
“Yo no usé sustancias para mejorar el rendimiento como se alega en mi contra. Tampoco violé de manera alguna el contrato colectivo de para prevenir el uso de drogas, y para probarlo pienso llevar esta lucha hasta la corte federal”, manifestó Rodríguez en una declaración escrita emitida en enero.
Pero con el peso del gobierno federal encima, A-Rod dijo que pagaba alrededor de $12,000 mensuales a Bosch para que le diera jeringas cargadas con hormonas que se aplicaba en el estómago, que en alguna ocasión le sacó sangre en el baño de un club nocturno de South Beach, Florida, y que el primo de Rodríguez, Yuri Sucart, era su conexión para conseguir los estupefacientes.
Con ese dinero, Rodríguez declaró que compraba crema de esteroides, gomas comestibles de testosterona e inyecciones de la hormona humana para el crecimiento. Además, Bosch le daba instrucciones para salir limpio en los controles que realiza Grandes Ligas para detectar drogas.
Además, el periódico reporta que el pelotero contribuyó con un anticipo de $25,000 para que Bosch, cuya sentencia se dictará el 8 de diciembre luego de que se declarara culpable ante un juez federal de conspirar para distribuir testosterona, contratara a un abogado.
El reporte del Herald mancha de nueva cuenta la palabra de Rodríguez, quien logró que se redujera a 162 partidos la suspensión de 211 encuentros que Grandes Ligas inicialmente le había impuesto. El castigo llegó a su fin la semana pasada cuando el guante del venezolano Pablo Sandoval atrapó el último out de la Serie Mundial.
Esta información podría ayudar en el caso que las autoridades tienen abierto en contra de los colaboradores de Bosch. Al menos cuatro, incluyendo al falso doctor, se han declarado culpables de los cargos federales.
El único que no lo hizo fue Sucart, quien enfrentará juicio el año entrante, proceso en el que se espera que el Cacique sea un testigo.
Con esta revelación, Rodríguez sale aún más manchado del escándalo más grande de esteroides en el deporte profesional de Estados Unidos, justo cuando se prepara para regresar a cubrir la antesala del Yankees la temporada entrante.