Meten sin dificultad droga, alcohol y navajas a Rikers Island
Dejan al descubierto las fallas para requisar al personal en la cárcel de Nueva York
Nueva York — Las ineficientes medidas para requisar al personal que trabaja en la cárcel de Rikers Island se hicieron evidentes una vez más, luego que un agente encubierto lograra introducir a la prisión cuchillas de afeitar, heroína, marihuana, alcohol y drogas de prescripción médica, a través de seis puntos diferentes de requisa.
Un reporte dado a conocer el jueves por el Departamento de Investigaciones (DOI), alertó sobre lo fácil que era ingresar contrabando de toda índole en al centro carcelario.
El alijo, del que se estima se pagó para introducirlo aproximadamente $3,600, fue vendido en el interior de Rikers por alrededor de $22,000.
En respuesta a esto, el Departamento de Correccionales (DOC) aseguró que implementará una serie de reformas que incluyen perros detectores de drogas, que serán colocados en los puntos de requisa por donde entra el personal; también se eliminarán los bolsillos en los pantalones de los uniformados y se colocarán vestidores fuera de las puertas de seguridad para obligar a que los empleados se cambien y dejen sus pertenencias antes de entrar a la cárcel.
El comisionado de correccionales Joseph Ponte aclaró a medios locales que su política es de “Cero Tolerancia” para cualquier persona, incluyendo el personal de la cárcel. “Hemos comenzado las reformas para hacer frente a las fallas detectadas en el informe del DOI y seguiremos trabajando en conjunto para mantener nuestras instalaciones seguras”.
En el reporte se aclara que pese a que algunas reformas ya se habían implementado en septiembre, el personal de Rikers Island las ignoraron por completo, como lo fue la orden de pasar toda comida o medicina a través del detector de metales y la máquina de rayos X. Un video de una cámara de seguridad reveló cómo las medidas eran rutinariamente violada.
El ingreso de contrabando en la cárcel no es algo nuevo, y durante el último año y medio fueron arrestados 6 guardias uniformados y una enfermera acusados por meter cosas prohibidas, lo que motivo que una serie de recomendaciones fueran hechas a mediados de 2013 por el predecesor de Ponte.
Entre tanto, el comisionado del DOI Mark Peters indicó que la reforma propuesta dentro de las recomendaciones se implementará durante los próximos seis meses y que con esto “podría ayudar a resolver el problema del contrabando”.
