Nuevos vehículos, muchas opciones, muchas confusiones
Los autos vienen con tantas características adicionales, que el consumidor paga por elementos que en realidad no necesita ni usará
Comprar un auto no es fácil, ya que puede ofrecer tantas opciones que marea. Algunas de ellas cuestan miles y jamás la usaremos.
Muchos consumidores compran vehículos con tantas opciones (loaded) que ni saben cuáles son, y terminan pagando de más algunas cosas que nunca usarán en el carro.
Y los fabricantes alemanes saben que a los consumidores americanos les gustan sus vehículos con muchos “chiches”, y les cargan de todo, tanto que un carro de $30,000 con el mismo motor y carrocería, puede subir hasta casi $50,000.
Ejemplo: un Porsche 911 que con sus 50 años a cuestas sigue en el ruedo, a pesar de la baja en las ventas de los deportivos, viene en 22 variantes, más sus opciones de pintura y muchas opciones como para atraer más compradores. Hace décadas solo venía con un par de colores y poco más.
Porsche no es el único que ofrece una gran variedad de opciones. Algunos SUV como los del BMW y los Audi difieren en pulgadas, y como los fabricantes de automóviles inventan nuevos nichos, se mezclan estilos de carrocería existentes a un ritmo sin precedentes.
Los fabricantes de automóviles alemanes por sí solos han ampliado sus modelos en un 25% en los últimos tres años y ahora ofrecen más de 200 modelos.
Ese crecimiento puede bajar para el 2018; sin embargo, una gama cada vez más amplia de opciones se convierte más en un obstáculo que una ventaja para los clientes y fabricantes.
Los productores están bajo presión para cambiar los recursos para desarrollar nuevas tecnologías, como los vehículos de auto-conducción, mientras que los consumidores a veces luchan con todas las opciones.
En el Auto de Show de Miami una señora me dijo: “No entiendo porque hay tantas variaciones de precios con un mismo auto, la cantidad de opciones es confusa, yo prefiero tener uno de menos complejidad”, y estoy seguro que ella no era la única confundida.
Se prevé que el número de modelos fabricados por las automotrices alemanas se estabilizará después de alcanzar un máximo de alrededor de 230 en 2018. La elección creciente pone presión sobre los fabricantes de automóviles para reducir los costos de producción y diferenciar sus ofertas a los consumidores.
Yo creo que la industria del automóvil se enfrenta a algunas tareas interesantes, porque hay tantos nuevos detalles electrónicos y accesorios de performance, que casi duplican el precio del carro y muchos consumidores por estar mal informados no compran un vehículo para su necesidad real, y hacen gastos innecesarios.
Los fabricantes de automóviles buscan algo especial para presentar, pero a la mayoría de los clientes en realidad no les importa mucho. Los presupuestos de marketing tienen que estirarse para cubrir más terreno y los concesionarios a veces tienen dificultades para explicar las diferencias. Están llegando a un punto de saturación.
General Motors tiene tantos modelos en el mercado que es casi imposible anunciarlos todos. Chrysler está llegando a ese límite. En tanto Ford se sostiene con pocos modelos, pero con muchas opciones, con su imagen de “One Global”.
Un montón de opciones son útiles cuando las personas saben lo que están buscando, pero en general, la gente no sabe exactamente lo que quiere.