Hispanos y afroamericanos aún dominan en Hamilton Heights (fotos)

Los vecinos del barrio al norte de Manhattan ven los primeros signos de la gentrificación

Que no falten las botánicas donde haya hispanos.

Que no falten las botánicas donde haya hispanos. Crédito: Gerardo Romo

@JoaquinBotero

Barbara Legrad (70) nació en Curazao y es de madre dominicana, pero Hamilton Heights, en el Alto Manhattan, es su barrio desde hace 40 años. Aquí se mudó con su esposo, también isleño, y sus hijos viven en Holanda, nación de la que Curazao fue colonia. A veces todos se ven en el Caribe o en Europa, pero Legrad tiene claro que no se mueve de su barrio.

“Lo tengo todo en la Broadway y a pocas calles a la redonda”, dice Legrad en el Salón de Belleza Colón, donde es clienta habitual. “Vengo a esta peluquería hace veinte años”.

La dueña del salón es Marisol Colón, de la capital dominicana, quien habla de sus clientes variados: hispanos, afroamericanos y unos pocos anglosajones. Así justamente es la composición poblacional del vecindario: 40% hispana, 40% negra, 15% blanca y el resto de dos razas, según City-data.com.

Hamilton Heights forma un rectángulo entre las calles 135 y la 155 y la avenida Edgecombe al este y el río Hudson al oeste. Manhattanville está al sur y Washington Heights al norte. Tiene patrimonio arquitectónico en el sub barrio conocido como Sugar Hill, tiene parque con vista al río (Riverbank) y hasta contiene la hermosa universidad City College.

Pilar González (22) y Daniel Echavarría (21) son novios y estudian Teatro en el City College. Ella de origen dominicano y él puertorriqueño, pasan muchas horas en el campus universitario y en los alrededores. Tanto en su facultad como el barrio predominan las minorías negra e hispana, pero la mayoría de los profesores son blancos. Miran a su alrededor y admiran la arquitectura. “A diferencia de las otras universidades, nosotros tenemos una comunidad”.

“Nos gusta la comida del vecindario, es muy variada. Vamos a cualquier lugar nuevo. Pero sí notamos que el incremento de las rentas ha empujado a algunos residentes. ¿Por qué no armonizar los grupos, los viejos y los nuevos?”, pregunta González.

No son los únicos que se preguntan adónde va el vecindario, que se recuperó de una época de alto crimen en los años 90 y ahora se está gentrificando.

El mexicano Delfín Ramírez (35) lleva 15 años en el barrio. El empleado de supermercado recuerda que cuando llegó todavía se veían vendedores de droga, pero ahora no.

“Últimamente se subieron los blancos y han abierto restaurantes que antes no había. Por fortuna todavía tengo vecinos y restaurantes mexicanos”.

Juan Guzmán (64) posee su negocio D&J’s Travel Agency desde hace 25 años, donde también trabaja en impuestos, envíos, seguros, servicios notariales e inmigración. “Los cambios no me parecen negativos, han pasado cosas buenas”, dijo. “La subida de las rentas es normal, nada está en baja, todo sube”.

Un “laundry-lounge” en Manhattan Ave., un café que vende ‘victuals’ (o sea vituallas), palabra sofisticada y en desuso, bares para ver fútbol americano, hamburguesas de $16, son signos de la gentrificación de barrio.

Por ahora todos caben: sigue habiendo fruterías, taquerías y barberías. Pero para algunos, la dirección es clara, sobre todo ante la subida de los arriendos.

“En los nueve años que llevo he visto que los hispanos se van y llegan los blancos”, dijo el dominicano Rafael Perdomo (38), quien vive en un apartamento de un edificio cooperativo propiedad de su suegro. “O la gente tiene que compartir para poder pagar y a veces los caseros ponen problema”

El nombre de Hamilton Heights surge de su fundador Alexander Hamilton, quien vivió dos años en el área cuando era todavía rural. Su casa está en una de las fotos.

La mayoría de las casas fueron construidas cuando se extendieron hasta el norte las líneas del metro a finales del siglo 19 y principios del 20.

Las viviendas se hicieron menos deseables para los residentes blancos cuando se empezaron a mudar residentes negros entres los años 1930 y 1940.

Sin embargo, los residentes negros tenían el mismo nivel de ingreso que los blancos.

Transporte

El tren 1 en las estaciones 137 y 145. Los trenes A, B, C y D en la calle 135, 145 y 155. También los autobuses M3, M4, M, M11, M100, M10, Bx6, y Bx19 recorren el área.

Estación de Policía

Cuartel 30. 451 Calle 151 Oeste.

(212) 690-8811

Biblioteca Pública

503 Calle 145 Oeste.

(212) 926-2147

Oficina de correo

US Post Office. 521 Calle 146 Oeste.

(212) 281-1538

Bienes raíces

Para comprar: Una casa de una familia $630,000. Un apartamento de una habitación $310,000. Un condominio de dos habitaciones $820,000. Un apartamento en un edificio cooperativo de dos habitaciones $320,000

Para alquilar: Los estudios empiezan desde $1,300. Apartamentos de una habitación empiezan en $1,500. Apartamentos de dos habitaciones empiezan en $2,000. Apartamentos de tres habitaciones empiezan en $2,400

Un negocio

Queens Vintage Place. 1667 Amsterdam Ave. Venta de ropa y objetos bellísimos.

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