Sin acuerdo a la vista tras reunión entre sindicatos y comisionado de NYPD
Patrick Lynch, presidente de la Asociación Benevolente de Patrulleros, volvió a atacar al alcalde
NUEVA YORK – En un evidente estancamiento terminó el miércoles la reunión entre el Comisionado de Policía, Bill Bratton, y los jefes de los cinco sindicatos policiales, convocada para encontrar una salida a la crisis desatada entre la Fuerza y el alcalde luego del asesinato de los oficiales Wenjian Liu y Rafael Ramos en diciembre.
Bratton había dicho, antes de la reunión, que ésta era “una continuación de lo que hacemos de manera rutinaria” y que se discutirían las preocupaciones de los sindicatos sobre la seguridad y moral de los oficiales, además de la caída de actividad policial registrada luego de la muerte de Liu y Ramos.
Quien sí habló, convertido una vez más en vocero de sus colegas, fue Patrick Lynch, presidente de la Asociación Benevolente de Patrulleros, la unión más importante del NYPD, volvió a atacar al alcalde. Además, rechazó tajantemente la acusación de que los uniformados no están cumpliendo con su trabajo.
Las palabras de Lynch parecen indicar que las perspectivas de mejorar las relaciones entre City Hall y la Policía están tan lejos como antes de la reunión.
“Tuvimos un diálogo franco sobre la seguridad pública y de nuestros oficiales, y agradezco el apoyo de la comunidad. El problema es que no hay voluntad en la alcaldía para solucionar las diferencias”, argumentó Lynch.
El sindicalista remató sus declaraciones con otro abierto desafío a la autoridad del funcionario electo: “Ojalá hubiera un liderazgo en City Hall”.
Lynch también insistió con que el sindicato no está promoviendo una protesta laboral y que los oficiales continúan haciendo su trabajo y exponiéndose al peligro para mantener a la ciudad segura.
Sin embargo, las estadísticas del NYPD demuestran que ha habido una dramática caída en multas y detenciones en toda la ciudad luego de los asesinatos de Liu y Ramos. La semana pasada, el número de citaciones por delitos menores y violaciones de tráfico se redujo en más de 90 % en comparación con la misma semana del año anterior. Las detenciones por delitos más graves disminuyeron 55%.
La posibilidad de una desaceleración fue evidente el día después de los asesinatos, cuando comenzó a circular entre los oficiales que dos vehículos debían responder a todas las llamadas de radio y no hacer arrestos, a menos de que fuera absolutamente necesario.
Una reciente publicación online muy popular entre los uniformados se refirió a la postura como “Operación Manténgase Bajo, Protéjase, No Haga Nada”.
La muerte de los oficiales exacerbó las tensiones entre De Blasio y los policías, que ya estaban molestos por los comentarios del alcalde tras la decisión de un gran jurado de no enjuiciar al oficial relacionado con la muerte de Eric Garner y por sus declaraciones simpatizando con los manifestantes anti-brutalidad policial.
El sargento Ed Mullins, director de la Asociación Benevolente de Sargentos, argumentó que en el clima actual tenía sentido que los policías tomaran precauciones adicionales que podrían resultar en un menor número de detenciones. “Hay protestas, la moral está baja”, sostuvo Mullins. “Tenemos el asesinato de dos agentes de policía. La amenaza de asesinato es real, ya sucedió”.
Grupos anti-brutalidad policial aprovecharon la caída de cifras del trabajo policial para resaltar lo que ellos consideran un fracaso de la política de “ventanas rotas”. “La disminución en las multas y arrestos por delitos simples pone en duda la eficacia las tácticas policiales hiperagresivas que rutinariamente atacan a las comunidades de bajos ingresos y de color”, indicó Monifa Bandele, portavoz de Comunidades Unidas para la Reforma Policial (CPR).
*Los oficiales hicieron la mitad de los arrestos durante la semana que terminó el domingo 4 de enero en comparación con la misma semana del año anterior.
*En toda la ciudad se emitieron 347 citaciones criminales comparadas con 4.077 hace un año.
*Las multas por estacionamiento y tráfico también se redujeron en más del 90 por ciento.
*Durante la semana siguiente al 20 de diciembre, la delincuencia bajó. Pero en la segunda semana, las estadísticas mostraron un repunte: los robos aumentaron 13,5 %, de 318 a 361 en comparación con 2013.
*Los asesinatos se incrementaron a 11 durante la semana que terminó el 4 de enero, en comparación con siete ocurridos la misma semana del año anterior.
*Los números dados a conocer el lunes revelan un descenso en las detenciones en casi todas las categorías, incluyendo la posesión de armas y conducir en estado de ebriedad, además de las tres categorías más activas para citaciones: violaciones de estacionamiento, (93% de 16.008 a 1.191); infracciones de tránsito (92%, de 9349 a 749); y los delitos de bajo nivel (91%).
Fuente: NYPD