Estrella de Quisqueya para todos los latinos

@NubeUrgiles

El All Stars de la NBA obra el milagro de traer al vecindario a las máximas estrellas de la liga.

Mientras Carmelo Anthony, Al Horford, Tim Duncan y Chris Paul estuvieron ayer empacando comida para repartir a familias pobres de la ‘Gran Manzana’, LeBron James, Stephen Curry y otros jugadores participaron en clínicas dirigidas a niños de 100 escuelas de los cinco condados para inculcarles la importancia de la actividad física.

Ambas actividades son parte de los esfuerzos de acercamiento a la comunidad del programa caritativo “NBA Cares”.

“Esto es algo muy bonito”, dijo el dominicano Al Horford, pívot de los Hawks de Atlanta. “Yo siento que lo que estamos haciendo acá, especialmente con la comida, es algo muy especial, va a ayudar a muchas personas y eso me llena mucho”.

Al Horford es el rostro latino en el Juego de Estrellas que se disputará mañana domingo en el Madison Square Garden. Será su tercera participación en el All Stars.

“Para mí es un honor muy grande, especialmente aquí en Nueva York“, dijo Horford haciendo un alto a su labor altruista en el Metropolitan Pavilion de Manhattan.

“Bueno, donde sea represento a la comunidad latina“, agregó. “Pero aquí hay una fuerte presencia de latinos y me da mucho orgullo representar a mi familia y a la comunidad”.

Como representante hispano en la NBA, indicó que uno de sus objetivos es educar e inculcar el deporte especialmente en la niñez y decirles que es posible llegar a jugar cualquier deporte a nivel profesional.

“Cuando yo venía creciendo, siempre fue mi anhelo poder jugar en la NBA y lo vi casi imposible, pero lo pude lograr”, indicó el basquetbolista de 28 años. “Por eso mi mensaje a la juventud es que se mantengan positivos y que sueñen en grande, ya sea en el baloncesto, el fútbol, el béisbol, que se mantengan enfocados y que ellos lo pueden lograr”.

Como buen dominicano, Alfred Joel Horford contó que jugó béisbol cuando era pequeño. “Pero pronto me enamoré con el juego de baloncesto”, señaló.

En ese cambio mucho tuvo que ver su papá, quien fue el primer quisqueyano en jugar en la NBA.

“El fue una de las razones que me motivó jugar baloncesto”, indicó Al sobre su papá Alfredo William Horford, más conocido como ‘Tito’, quien fue seleccionado por los Milwaukee Bucks en el puesto 39 (2ª ronda) del draft de 1988.

Tras ayudar a los ‘Gators’ conquistar dos títulos consecutivos del baloncesto universitario (2006 y 2007), Al decidió entrar en el draft de 2007, siendo elegido por Atlanta en la tercera posición, detrás de Greg Oden y Kevin Durant.

El resto es historia. Al se ha establecido en la NBA como un jugador talentoso. El considera que su éxito se debe al trabajo extra que realiza fuera de la cancha.

“Es importante, no sólo el talento. Para estar en este nivel hay que trabajar y trabajar muy fuerte”, hizo enfásis. “Es algo que lo aprendí en la universidad con mi entrenador (Billy) Donovan. A mí me da mucho orgullo poder salir todos los días a trabajar y mejorar como jugador”.

Su consejo a los jóvenes que quieran seguir sus pasos: “No sólo es suficiente tener talento, hay que trabajarlo”.

Eso, aunado a la labor de sus compañeros, tiene a Atlanta en el tope de la Conferencia del Este y con aspiraciones bien altas. “La clave para nosotros es seguir mejorando cada día y prepararnos para la postemporada”, consideró. “Me llena de mucha emoción ver lo que podemos hacer este año con este buen equipo que tenemos”, agregó. Y no teme a los ‘peces gordos’ de la Conferencia del Oeste.

“Los mejores equipos están en el Oeste, pero uno nunca sabe, especialmente en una serie de siete juegos cualquier cosa puede pasar”, sentenció