Centroamericanos dejan a La Bestia y buscan rutas alternas

El INM ha incrementado sus operativos para detener inmigrantes en las carreteras

Centroamericanos detenidos a bordo de un camión.

Centroamericanos detenidos a bordo de un camión. Crédito: Policía Federal | Policía Federal.

MÉXICO
“Juancho” pisó México con la idea de tomar el tren de carga “La Bestia” para viajar sobre él como indocumentado. Sin embargo, los retenes y la seguridad que rondan el ferrocarril desde que arrancó el Operativo Frontera Sur lo obligaron a caminar rumbo a Oaxaca hasta que, debilitado por el sol, se desmayó sobre la carretera. Cuando despertó ya estaba esposado y camino al centro de detención del Instituto Nacional de Migración (INM).

Este inmigrante fue en marzo uno de los 36,376 guatemaltecos que fueron deportados entre los meses de enero y mayo sobre las carreteras de Chiapas, el estado donde se han concentrado la mayor cantidad de retenes y operativos en carretera del INM.

El sacerdote Alejandro Solalinde, fundador del albergue Nuestros Hermanos en el Camino, en Oaxaca afirma que los retenes en la carretera solo hacen que los migrantes caigan en manos de “traficantes de órganos” y delincuentes y no inhibe la migración centroamericana a la que han venido atacando “con descargas eléctricas”.

“Después de cinco meses ‘Juancho’ está otra vez aquí”, dice. Ahora se va a ir en autobús.

Los inmigrantes centroamericanos están contratando traficantes que se sepan mover en camiones de pasajeros o camionetas de transporte para cruzar México de sur a norte y las autoridades migratorias han cambiado su foco: ahora sus ojos están puestos en las carreteras.

En el sur, además de Chiapas, en Veracruz vigilan principalmente la ruta Córdoba- Minatitlán y, en Tabasco, la carretera Villahermosa- Teapa donde ha habido mayor número de detenciones entre enero y mayo: 15,049 y 9,232, respectivamente, de acuerdo con estadísticas de la Oficina de Política Migratoria.

Al centro, Querétaro está en la mira principalmente la zona conocida como Puerto de Carroza y San Luis Potosí (en el tramo Ciudad Valles). En el Estado de México, el pasado 9 de julio, un “pollero” abandonó en un tráiler a 53 migrantes en la carretera Texcoco-Lechería, al noreste del estado, hasta donde llegaron los agentes del INM para sumarlos a sus detenciones.

Millas al norte, la carretera Monterrey- Nuevo Laredo está la mira. El estado de Nuevo León es la segunda entidad del norte de México con mayor número de deportaciones que asciende a 1,783 solo por debajo de Tamaulipas con 2,317 personas y por encima de Coahuila quien durante los primeros cinco meses del año deportó a 1,600 personas.

Hace dos años el hondureño Salvador fue detenido en esta última ruta, a unas millas de Texas, donde se hacía trabajando, pero no se ha rendido y hoy solo ha hecho una pequeña parada en Tenosique Tabasco, donde sigue intentando conseguir su sueño.

Deportaciones

Entre los cinco primeros meses del año Coahuila deportó a 1,600 personas; Nuevo León a 1,783 y Tamaulipas a 2,317.

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