Editorial: Un insulto a los inmigrantes
La Operación Mojado es una página de nuestra historia que jamas debe repetirse
La idea de una “fuerza de deportación” para expulsar del país a 11 millones de personas es una propuesta absurda, indignante y bárbara. Es inconcebible que en el debate político de hoy se quiera repetir una de las paginas más tristes de la historia estadounidense. La propuesta de crear un estado policial para echar a familias enteras cuyos integrantes llevan décadas trabajando, estudiando y aportando a Estados Unidos es repugnante e inhumana.
El millonario Donald Trump ha creado una falsa narrativa sobre la inmigración, en donde Estados Unidos está invadido por violadores y criminales mexicanos que cruzan la frontera ilegalmente como parte de un plan del gobierno mexicano. Bajo este argumento, se necesita un muro infranqueable para evitar el cruce y deportaciones masivas para expulsar a quienes ya han entrado. Una solución de simplista para un diagnóstico fantasioso.
La fantasía se termina cuando el precandidato republicano a la presidencia, que encabeza la justa partidaria, sugiere el modelo de la Operación Mojado realizado hace más de medio siglo. Esta fue una operación militar recordada porque sus barcos usados en las deportaciones que fueron comparados por una investigación legislativa posterior como “barcos esclavistas del Siglo 18” por sus malas condiciones y en donde 88 deportados murieron asoleados por ser abandonados en el desierto. Estas son tan solo algunos de los hechos en esa trágico periodo. Ni que decir de los estadounidenses que fueron deportados -como ocurre hasta el dia de hoy- por ser confundidos con indocumentados.
Por eso, la expresión de Trump que se podrá hacer eso de una forma “humana” indica cinismo o ignorancia. Además, no hay nada de humanidad en sugerir operativos militares -porque eso fue la Operación Mojado- en vecindarios para atrapar a padres, madres y niños y meterlos en barcos y autobuses para dejarlos del otro lado de la frontera.
La propuesta es un insulto a la comunidad inmigrante. Hay una lógica perversa, una pendiente resbaladiza en esto señalar a los inmigrantes como los responsables de todos los males, de querer deportar a los niños traídos por sus padres después de haber crecido aquí y la propuesta de una deportación masiva.
La discusión seria sobre deportaciones masivas, y el que Trump mantenga su popularidad, revela un nivel de hostilidad dentro de la base republicana que no tiene nada que ver con los valores que ayudaron a construir este país.
