Enfermedades crónicas siguen impactando a 15 años del 9/11
Un nuevo reporte de las autoridades de Salud de Nueva York revela que muchas personas que estuvieron en la Zona Cero siguen sufriendo de cáncer, asma y enfermedades mentales
A pesar que han pasado 15 años desde los ataques terroristas del 11 de Septiembre de 2001, aún muchos civiles y trabajadores de rescate que acudieron a la Zona Cero siguen sufriendo varias enfermedades crónicas incluyendo diferentes tipos de traumas psicológicos.
El impacto a largo plazo en la salud que causaron los atentados que destruyeron las Torres Gemelas fue dado a conocer este viernes por el Departamento de Salud e Higiene Mental de la ciudad de Nueva York (DOHMH), que reveló un estudio originado por el World Trade Center Health Registry, en donde se registran a las personas que se enfermaron a consecuencia del 9/11.
Entre los resultados de la investigación destaca que más casos de cáncer de lo esperado se encontraron entre los trabajadores de rescate y los civiles sobrevivientes del 9/11, cuando se compara con las cifras de la población en general en el estado de Nueva York entre 2007 y 2011 (11% frente a 8% respectivamente). Esto incluye todos los tipos de cáncer, aunque el de próstata fue el más prevalente.
Los investigadores también descubrieron que los casos de asma como los de trastorno de estrés post-traumático (PTSD) estaban asociados de manera independiente con los síntomas persistentes de reflujo gastroesofágico (GERS) que desarrollaron algunos pacientes inmediatamente después del 9/11 así como los que lo comenzaron a sufrir años después.
De igual forma, el reporte del DOHMH revela que los pacientes participantes en el estudio médico, que estuvieron dentro de las Torres Gemelas del World Trade Center (WTC) en el momento del ataque, eran 30% más propensos a sufrir PTSD y tenían un 50% más de probabilidades a ser bebedores compulsivos 10 años después del 9/11.
Por su parte, los trabajadores que participaron en la selección de los escombros del WTC en el vertedero de Fresh Kills, o los que los trasportaron a ese lugar en barcazas, tenían 5.4% más riesgo de sufrir nuevos ataques de asma.
“Quince años después, el World Trade Center Health Registry del Departamento está haciendo seguimiento a la salud de 71,000 personas directamente expuestas a los ataques y las está refiriendo a cuidados médicos a través del programa federal WTC Health Progam”, dijo la comisionada del DOHMH, la doctora Mary Bassett.
El reporte del DOHMH también indica que aquellos trabajadores con condiciones de salud crónicas relacionadas con el 9/11 eran más propensos a jubilarse anticipadamente o experimentaban la pérdida de su empleo. La probabilidad de retirarse o perder su trabajo más temprano también aumentaba considerablemente cuando el trabajador también sufría de PTSD.
El estudio dado a conocer por el DOHMH fue publicado en el American Journal of Industrial Medicine que le dedicó una edición especial al 9/11.