Cineasta Michael Moore promueve llamado a “resistencia” contra Trump en el Colegio Electoral
Aunque Trump ganó en las urnas, su triunfo no será oficial hasta que los 538 miembros del Colegio Electoral certifiquen los resultados
WASHINGTON.- En cinco días, el Colegio Electoral certificará los resultados que dieron como ganador al republicano Donald Trump, pero el cineasta Michael Moore y activistas de todo EEUU promueven un llamado a la “resistencia” para impedir, en aras de la seguridad nacional, que éste asuma el poder el mes próximo.
Aunque Trump ganó en las urnas, su triunfo no será oficial hasta que los 538 miembros del Colegio Electoral certifiquen los resultados cuando se reúnan en sus respectivas capitales, y en la capital estadounidense, el próximo 19 de diciembre.
Moore, al igual que activistas en todo el país, quieren evitar que Trump se instale como el 45 presidente de EEUU el próximo 20 de enero.
En un apasionado mensaje a través a la cadena MSNBC, Moore pidió que al menos 37 electores republicanos “tengan valor” y voten por un tercer candidato, de ser necesario.
“Que demuestren que les importa su país. Este hombre (Trump) no asiste a las reuniones diarias sobre seguridad nacional, cuando debería hacerlo”, explicó Moore, quien teme que la presunta negligencia de Trump provoque atentados que cobren la vida de estadounidenses.
Trump still refusing to attend the daily national security briefing. My blog: "Donald Trump Is Gonna Get Us Killed" https://t.co/Xf9z4xcEQo
— Michael Moore (@MMFlint) December 14, 2016
Dirigiéndose a los electores, advirtió: “Ustedes nos están poniendo en peligro al colocar a Donald Trump en la presidencia… no nos hagan esto, no lo hagan, es demasiado peligroso y sus compatriotas estadounidenses se lo agradecerán si no lo hacen”.
"You're putting us in danger by putting Donald Trump into office." – @mmflint to the Electoral College: https://t.co/udF6CiLN8L pic.twitter.com/SQ9gdyav4Q
— MSNBC (@MSNBC) December 14, 2016
Un sistema complejo
El sistema electoral en EEUU es descentralizado y fue creado en 1787 por los próceres del país como una respuesta consensuada entre los que apoyaban un voto directo del pueblo, y los que apoyaban que el Congreso eligiese al presidente.
Así, bajo el sistema, cada estado obtiene un elector por cada representante en el Congreso. En los comicios presidenciales, los estadounidenses en realidad están votando por un grupo de electores que, a su vez, se comprometen a votar por el binomio presidencial según los resultados populares.
No existe ley federal que obligue a los electores a ceñirse al voto popular en determinado estado. Sin embargo, en 29 estados y en el Distrito de Columbia, sede de la capital estadounidense, las leyes exigen que los electores voten por el candidato que ganó el voto popular en sus respectivas jurisdicciones.
En Colorado, por ejemplo, si los electores se niegan a votar por la demócrata Hillary Clinton, éstos pueden ser reemplazados por otros que sí cumplan con la ley estatal, según determinó ayer una juez en Denver.
Es que en Colorado, tres electores del llamado movimiento “Hamilton Electors”, han dicho que votarán por un tercer candidato, como parte de sus esfuerzos por frenar a Trump, aún si eso les genera multas y hasta un año en prisión.
Según el grupo no partidista “FairVote”, que aboga por una reforma electoral, ha habido a través de la historia 157 casos en los que los electores se rebelaron contra el candidato de su partido.
Miss us? Catch up on electoral reform news with our round up of folks writing about FairVote’s reform vision. https://t.co/Xzf3kx9QtL pic.twitter.com/jj05UHNhRW
— FairVote (@fairvote) December 3, 2016
Un asunto personal
El asunto se ha vuelto personal para las fuerzas “anti-Trump”, y miles de votantes incluso han inundado a diario los buzones de correo y de teléfono de algunos de los 538 miembros del Colegio Electoral, con la idea de que, en aras de la seguridad nacional, éstos voten en contra del magnate empresarial.
Según informes de prensa, las decenas de miles de mensajes van desde plegarias y súplicas hasta amenazas, para que el Colegio Electoral rechace a Trump.
Tras una reñida y costosa contienda, Trump venció en las urnas a su rival demócrata, y obtuvo 306 votos del Colegio Electoral, más de los 270 votos mínimos requeridos para ganar la presidencia.
Clinton obtuvo 232 votos del Colegio Electoral, pero la victoria de Trump no fue un “alud” ni fue “histórica”, como alega su equipo, además de que la demócrata le ganó por amplio margen en el voto popular: según datos actualizados, Clinton lo aventaja con 2,84 millones de votos, o 2,1 puntos porcentuales.
De hecho, parte de la campaña de presión se centra en destacar que Clinton ganó el voto popular al obtener el apoyo de 60 millones de estadounidenses.
En la actualidad, 40 electores, todos demócratas menos uno, enviaron una carta el lunes pasado al Director Nacional de Inteligencia, James R. Clapper, pidiendo detalles del alcance del ciberespionaje de Rusia para sabotear el proceso electoral y ayudar al triunfo de Trump.
Ese esfuerzo es liderado en California por Christine Pelosi, hija de la líder de la minoría demócrata en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.
Aunque, según analistas, estos esfuerzos probablemente no alterarán los resultados del pasado 8 de noviembre –los partidarios de Trump lo creen “el hombre perfecto para salvar” a EEUU-, al menos sirve de “válvula de escape” a la frustración de quienes aún no aceptan su triunfo.