Video: La conmovedora despedida de una perrita y su dueño agonizante
La familia quería que Mollie comprendiera que su amo no regresaría a casa
Ryan Jessen pensó que su dolor de cabeza era sólo una migraña, pero resultó algo mucho más complicado: una hemorragia cerebral ventricular. Murió el 30 de noviembre a los 33 años.
Su fiel compañera se llama Mollie, una dulce perrita que sin duda resintió la separación de su amo durante los días en el hospital.
La familia Jessen solicitó permiso al Rideout Memorial Hospital, donde Ryan pasó sus últimos días, para que Mollie pudiera acudir a la habitación de su amado humano para despedirse de él y, de alguna manera, comprender que no volvería más a casa.
El conmovedor video, compartido por The Dodo, muestra a Mollie olfateando a su amo y reconociéndolo entre todas esas mangueras que lo conectaban a los aparatos del hospital.
Los Jessen mantendrán a Mollie, porque es parte de su familia, y donarán los órganos de Ryan.