Republicanos del Senado postergan voto sobre anulación de “Obamacare”
Bajo la expansión de “Medicaid”, millones de personas de bajos recursos han obtenido cobertura médica desde la puesta en marcha de “Obamacare”
WASHINGTON.- Ahorrándose una segura derrota política, los republicanos del Senado postergaron este martes el voto para anular “Obamacare” esta semana, mientras los demócratas impusieron condiciones para arrancar el debate y médicos y agrupaciones hispanas advirtieron del impacto de la “tóxica” medida.
El líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, debía someter a voto entre jueves y viernes la iniciativa para desmantelar “Obamacare” pero, por falta de consenso entre su propio partido, éste quedó postergado para después del receso de una semana por las celebraciones de la Independencia de EEUU el 4 de julio.
“Vamos a seguir presionando, porque creemos que el estatus quo es insostenible”, dijo McConnell, rodeado de otros líderes de su bancada.
Para mitigar este revés político, el presidente Donald Trump, y el vicepresidente Mike Pence, invitaron a la Casa Blanca a los republicanos para evaluar la estrategia a seguir, en vista de que no tienen los 50 votos mínimos necesarios para aprobar su propia medida sin ayuda de la oposición.
Trump aseguró que “no hay más opción que resolver esta situación. Obamacare se está derritiendo y los precios van subiendo”, aunque más adelante admitió que, si no logran su anulación, “va a ser algo que no nos gustará, pero está bien; lo entiendo muy bien”.
Un análisis de la Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO, en inglés) señaló ayer que la versión del Senado contra “Obamacare” dejaría a unos 22 millones de personas adicionales sin cobertura médica para 2026.
Eso, sumado a la feroz campaña de persuasión en contra de la medida republicana, que realizan demócratas, asociaciones médicas, y grupos cívicos progresistas, fue suficiente para hundir el optimismo de los republicanos.
En un hemiciclo donde los republicanos suman 52 escaños contra 48 demócratas, McConnell no podía permitirse más de dos deserciones, pero varios prominentes senadores republicanos habían advertido de que no votarían por la versión actual.
La lucha interna enfrenta a los ultraconservadores, que exigen una legislación “más dura” -y no una a medias tintas-, y los moderadores, preocupados, por ejemplo, por los profundos recortes al “Medicaid” y a la expansión del popular programa.
Bajo la expansión de “Medicaid”, millones de personas de bajos recursos han obtenido cobertura médica desde la puesta en marcha de “Obamacare”, incluso en distritos que votaron por Trump en 2016.
La senadora republicana por Maine, Susan Collins, se hizo eco del escepticismo en torno a la medida, al asegurar que ésta no resuelve los fallos de “Obamacare”.
La reforma sanitaria de 2010 es pieza clave del legado de la Administración Obama y, si bien fue aprobada cuando los demócratas tenían una súper mayoría en el Senado, ésta fue sometida a más de un año de audiencias, consultas con grupos de los sectores público y privado, y un proceso de enmiendas.
“Podrida en su núcleo”
El líder de la minoría demócrata en el Senado, Charles Schumer, afirmó en rueda de prensa que, sin importar los ajustes que los republicanos le hagan durante el receso de la próxima semana, la medida “está podrida en su núcleo” y ofreció condiciones para siquiera arrancar el debate.
“Los republicanos no pueden extirpar el núcleo podrido de su medida de cuidado de salud”, afirmó Schumer, y pidió que los republicanos abandonen los recortes tributarios para los ricos, los recortes a “Medicaid” y los esfuerzos para anular la reforma, como condición para dialogar sobre cómo mejorar la ley.
“Tenemos un buen chance de derrotar (la medida), dentro de una semana, un mes, o un año”, vaticinó Schumer.
The healthcare fight is far from over. Hear more LIVE: https://t.co/FDnVHyMtkK
— Chuck Schumer (@SenSchumer) June 27, 2017
A su lado, el senador demócrata por Illinois, Dick Durbin, dijo que “Obamacare” tiene más apoyo que nunca porque “ha tenido un impacto fundamentalmente positivo para las familias” por la cobertura de condiciones médicas pre-existentes, y acceso a servicios de salud preventiva, entre otros beneficios.
Una medida “tóxica” para los hispanos
Médicos hispanos entrevistados por este diario aseguraron hoy que los recortes masivos a “Medicaid”, y cambios en los subsidios y regulaciones de la reforma sanitaria, violan la regla fundamental de su profesión de “no hacer daño”, y perjudicarán a los latinos desproporcionadamente.
“Estos esfuerzos perpetúan el hecho de que en EEUU el cuidado de salud sigue siendo un lujo, y la anulación de Obamacare perjudicará en particular a los hispanos, y a las personas de mayor edad porque el precio de su seguro se les va a quintuplicar”, dijo el oncólogo peruano, Elmer Huerta, director de una clínica de prevención del cáncer en el Centro Médico de Washington.
Por su parte, el ginecólogo guatemalteco, Sergio Rimola, calificó el plan de salud republicano como “cruel” porque encima agravará la situación de hispanos con alto nivel de pobreza “que no podrán pagar un seguro”.
“Si aprueban esta legislación, las mujeres tendrán menos acceso al cuidado médico… se retrocedería el reloj y volveríamos a cómo estábamos antes, cuando los hispanos esperaban a tener una urgencia para atender sus problemas médicos, y eso a largo plazo aumenta el costo de salud” en EEUU, dijo Rimola, haciendo una pausa de sus consultas.
Elena Ríos, presidenta de la Asociación Nacional Médica Hispana (NHMA, en inglés), lamentó que “el rumbo que está tomando el Senado para eliminar la cobertura para 49 millones de personas será devastador para nuestra comunidad latina”.
NHLA-BCRAletter by Sofia Zermoglio on Scribd
“No importan las enmiendas que se le hagan”, advirtió Ríos, también copresidenta del comité de salud de la Agenda Nacional de Liderazgo Hispano (NHLA, en inglés).
NHLA, una coalición de 45 agrupaciones latinas, envió hoy mismo una carta al Senado urgiendo el rechazo de la medida, tomando en cuenta que “Obamacare” ha dado cobertura a 4,2 millones de hispanos, y ha reducido la tasa de personas sin seguro en esta comunidad a 16,2% entre los adultos y a 7,5% entre los niños.
Feroz campaña de presión
Ambos lados del debate han engrasado su maquinaria publicitaria para persuadir a la opinión pública, y ninguno cede.
Un “súper comité de acción política” partidario de Trump, “America First Policies”, lanzó una multimillonaria campaña de anuncios para atacar al senador republicano de Nevada, Dean Heller, uno de los primeros desertores de la medida por los recortes a “Medicaid”, según el diario “The New York Times”.
Grupos progresistas como “Save My Care” y asociaciones médicas, también han lanzado una campaña de anuncios para proteger “Obamacare” y presionar a los republicanos moderados a votar en contra de la medida republicana.
We're going to keep fighting till the end to protect the health of all Americans. Call you Senators and make sure they #VoteNo: 202-839-9839
— Save My Care (@SaveMyCare) June 27, 2017