Halle Berry: “Una mujer puede ser más peligrosa que cualquier hombre”
La actriz es una madre desesperada por recuperar a su hijo en "Kidnap"
Una madre desesperada por recuperar a su hijo es imparable… y muy peligrosa. Ésa es la premisa de “Kidnap”, la última película de Halle Berry que se estrena hoy en la que la oscarizada actriz interpreta a Karla Dyson, una madre soltera lanzada en busca de los secuestradores de su pequeño sin tiempo de pedir ayuda.
A punto de cumplir 51 años y con energía para protagonizar films de acción, Berry nos recibió en Los Ángeles durante la promoción de “Kidnap”.
Pregunta: ¿Puede haber algo más fuerte que una madre que quiere defender a sus hijos?
Halle Berry: Entre los animales no hay nada más peligroso que ponerse en medio entre una madre y su cría. Y creo que ocurre lo mismo con los humanos. Las mujeres son muy emocionales, diferente a los hombres en ese sentido, y pueden ser más peligrosas porque pueden volverse más locas, dejarse llevar por el corazón sin pensar.
P: Incluso más peligrosas que los hombres…
H.B.: En ocasiones creo que una mujer puede ser más peligrosa que un hombre, porque puede tomar una decisión inesperada, de forma emocional sin pensar de forma lógica, actuando sólo por instinto.
P: La película está filmada y contada desde el punto de vista de tu personaje, el protagonista
H.B.: No pienso mucho en la perspectiva cuando estoy actuando, creo que eso es más labor del director. Mi trabajo como actriz es mantenerme honesta y verdadera, y lograr que mis escenas tengan sentido y muevan la película en la dirección que buscamos. Ése es mi foco.
P: En este film, además de protagonista, eres productora y has aportado muchas ideas en el guion. ¿Buscas participar cada vez más en los proyectos en que trabajas?
H.B.: Creo que sí. Como artista, en la medida en que he ido creciendo en este negocio, he llegado al punto en que quiero aportar, quiero tener algo que decir. En esta película era muy importante para mí que todo tuviera sentido, que fuera posible y creíble. Tenía que sentirse como momentos reales. Pensé que si en algún momento la audiencia diría “bueno, esto nunca pasaría así”, los perderíamos. Así que insistí e insistí en que todo encajara. Todo lo que ella hace es lo que tiene que hacer en esa situación.
P.: Después de tantos años de carrera estás haciendo una película de acción y te ves fantástica. ¿Cómo lo logras?
H.B.: Fui una gimnasta de niña. La preparación física siempre ha sido una parte muy importante de vida. Soy diabética, así que hacer ejercicio, comer bien y llevar una vida sana es fundamental para mi longevidad. Además, creo que es un estado mental. Me niego a que un número me defina y me marque lo que puedo y no puedo hacer. Yo voy a seguir luchando siempre.
P.: Las escenas en el auto son una locura…
H.B.: Y yo estaba en casi todas, pero tenía a un piloto de Fórmula 1 enganchando encima del minivan que controlaba la velocidad y el volante. Yo sólo tenía que estar en el auto, pero era la que estaba ahí dentro cuando los otros coches venían hacía el mío, salían despedidos en el último momento, daban vueltas de campana… Todo pasaba alrededor de mí y tengo que decir que fue terrorífico. Mi corazón después de cada toma… tenía un nudo en el estómago hasta que veía que cada uno de los chicos que estaban en esos autos estaba bien. Porque ellos tienen familias, esposas… Pueden morir haciendo una película, pero son tan profesionales que se sacuden el polvo y lo vuelven a hacer.
P.: O sea, tenías miedo por ellos, no por ti…
H.B.: ¡Me daba miedo por mí también! Hasta que decían “corten” temía por mí. Después del “corten” temía por ellos.
P: ¿Cómo fue trabajar con un director joven como el español Luis Prieto?
H.B.: Él es increíble. Lo que me encanta de él es que quería estar seguro de que contaba la película desde la perspectiva de una mujer. Porque la forma en que un hombre solucionaría las cosas es muy diferente. Siempre hablábamos de cómo una mujer haría las cosas, de cómo lucharía una mujer, de cómo reaccionaría cuando se llevan a sus hijos… Él estaba muy abierto a asegurarse de que se filmaba de esa manera, desde el punto de vista de ella.