Pedro Pascal regresa muy cambiado en lo nuevo de ‘Narcos’
Javier Peña viajará a Bogotá tras la caída de Pablo Escobar para enfrentarse a su nuevo enemigo: el cártel de Cali
Pablo Escobar está muerto, pero Javier Peña, uno de los agentes de la DEA (Administración para el control de Drogas) que colaboró activamente en su captura, está más vivo que nunca. Una vez más, Pedro Pascal volverá a ponerse en la piel del oficial estadounidense para enfrentarse en esta ocasión al cártel de Cali, el sucesor del trono del narcotráfico en Colombia tras la caída de Escobar.
A pocos días del estreno de la tercera temporada de ‘Narcos‘, una de las joyas más preciadas de Netflix, Pascal nos explica los cambios a los que hará frente su personaje en los nuevos capítulos de la ficción y nos confiesa también cuál es el secreto que, en su opinión, se esconde detrás del éxito de la serie. El resto de la historia estará disponible en las pantallas de todo el mundo el próximo viernes.
¿Cómo afrontaste el reto de ‘echarte a la espalda’ el peso de la tercera temporada de ‘Narcos’?
Es curioso porque cuando terminamos la segunda temporada de la serie yo no sabía qué iba a pasar con mi personaje, Peña, porque tanto él como su compañero, Steve Murphy (interpretado por Boyd Holbrook), eran parte del cuento de Escobar. Su existencia, por decirlo de alguna manera, iba unida a la ‘caza’ de su rival, y por eso su futuro tras la muerte del narcotraficante es una incógnita. De hecho, cuando Peña abandona Colombia junto a Murphy en el último capítulo, todos los espectadores creen que su carrera dentro de la DEA ha terminado, aunque al final sucede todo lo contrario. Lo más extraño para mí fue regresar a la serie sin Murphy, que había sido mi fiel compañero durante muchos capítulos, y enfrentarme a una Colombia totalmente diferente.
Este cambio radical del que hablas se refleja claramente en la actitud de Peña cuando llega a Bogotá, ya que se le ve incómodo en un puesto con demasiada responsabilidad y sin ningún apoyo estable en el país. ¿Fue difícil preparar esta nueva faceta del personaje?
Yo diría que fue una experiencia muy interesante, ya que la tercera temporada deja un poco más de lado el misterio que rodea a Peña y se centra en sus conflictos a nivel profesional. Mi personaje siempre había sido un hombre independiente que se negaba a seguir las reglabas y hacía todo a su manera, pero ahora la situación es muy diferente porque tiene un puesto con mucha menos ‘libertad’. Tampoco hay que olvidar que el ego de Peña está bastante dañado porque no presenció la muerte de Escobar, y esto es algo que le sigue atormentando. De hecho, yo creo que su regreso a Colombia es una especie de ‘búsqueda de redención’ por todos los años de su vida que ha invertido en la lucha contra el narcotráfico y que, por el momento, no han tenido los resultados que él esperaba.
¿Quieres decir que Peña ha dejado de ser Peña y es un personaje totalmente distinto?
Los espectadores verán a mi personaje vestido con un traje y dirigiendo a un equipo que depende de él, y esto es algo bastante ‘chocante’ porque Peña siempre había trabajado solo y le gustaba moverse escondido entre las sombras. Además, la red de narcotráfico a la que se enfrentará no tiene nada que ver con el imperio de Escobar, ya que el cártel de Cali está inmerso también el mundo de los negocios, de la política colombiana e incluso de la propia DEA. Todo esto hará que mi personaje se encuentre bastante desubicado y tenga que buscar su nuevo lugar poco a poco a lo largo de la temporada.
En la primera y en la segunda temporada de ‘Narcos’ conociste y estuviste en contacto con el verdadero Javier Peña. ¿Has vuelto a hablar con él para los nuevos episodios?
La verdad es que nuestra relación no ha sido tan cercana, y él tampoco se ha relacionado mucho con el equipo de producción; de hecho, fui yo el que le contó que mi personaje iba a regresar para la tercera temporada. ¡Se sorprendió muchísimo cuando se lo dije! Me gusta pensar que la relación entre los dos Peña, el real y el ficticio, es una colaboración invisible en el sentido de que la sombra del verdadero Peña siempre ha estado presente en mi forma de actuar. Cuando estábamos los dos juntos bebiendo tequila me dedicaba a mirarle y prestaba mucha atención a todo lo que me contaba acerca de sus experiencias del pasado, aunque había veces en las que me daba miedo preguntarle ciertas cosas porque temía tener demasiada información. Para mí, Peña fue un héroe y supo mantenerse firme frente a la corrupción.
Últimamente parece haber un ‘boom’ de interés por el narcotráfico y cada vez se hacen más producciones sobre este tema para la pequeña y la gran pantalla. ¿De dónde crees que proviene esta curiosidad actual por el mundo de la droga?
Desde mi punto de vista, todo tiene que ver con la lucha por conquistar el poder que ha existido siempre y que es inherente a la humanidad. Si lo piensas, la ambición ha sido una constante en todas las sociedades, desde el Imperio Romano hasta el negocio de la cocaína y la situación política actual. En la ficción ocurre lo mismo, y muchas de las series actuales (‘House of Cards’, ‘Juego de Tronos’ y, por supuesto, ‘Narcos’) giran en torno a la sed de poder de sus personajes. En el caso del narcotráfico, esta lucha por tener el control comenzó hace varias décadas pero sigue existiendo hoy en día, y por eso la gente quiere saber más. Además, el universo de la droga está lleno de dinero, excesos, fiestas y mujeres bellas, por lo que la gente se siente muy atraída por él. Todo se basa en tres pilares: admiración, fantasía y seducción. No se necesita un mundo ficticio de dragones como en Juego de Tronos para cautivar al público, sino que a veces la realidad y el pasado superan la ficción.
Eres el personaje más longevo de la serie hasta el momento… ¿Dónde crees que reside el éxito de ‘Narcos’?
¡En muchas cosas! Creo que lo que más gusta de la serie es que no tiene nada que ver con el clásico cuento de los buenos y lo malos, sino que profundiza en los matices de los personajes y ahonda en sus conflictos psicológicos. La gente se siente atraída por esta diversidad y, además, también disfruta de la lección de historia que ofrece ‘Narcos’. El estilo narrativo y casi documental de la serie hace que la cantidad de información que se va dando en cada capítulo no sea excesiva, y esto es clave. En definitiva, la serie está concebida como si fuera una máquina de tiempo que traslada a los espectadores al pasado de Colombia y les permite disfrutar de la textura visual del país.