¿Cuánto te puedes gastar en un auto?
Conoce la salud de tu estado financiero antes de poner los ojos en un carro nuevo que no puedas pagar
Si no tienes una idea clara de cuánto te puedes gastar en realidad, es muy fácil querer más de lo que puedes pagar al ponerte detrás del volante de un carro nuevo. Muchas personas se enamoran de un auto de ensueño y entran en un estado de negación cuando llega el momento de hacer las cuentas. O se dejan engañar por un vendedor amistoso para comprar más opciones de las que necesitan o cosas y aditamentos que no necesitan que tienen un costo extra, como un contrato de garantía de servicio extendida.
La asequibilidad, por supuesto, tiene diferente significados para distintas personas, y por lo general depende tanto del ingreso familiar como de las obligaciones existentes.
Al mismo tiempo, esta es una buena oportunidad para comparar precios. Las tasas de interés son todavía más bajas que hace 10 años y los prestamistas disminuyeron los requisitos para los créditos en los últimos dos o tres años.
Abajo, te brindamos conocimientos y estrategias para conseguir el mejor carro dentro de tu presupuesto. Te diremos cómo calcular lo que puedes gastar, y cómo y dónde buscar las tarifas de préstamos más razonables.
¿Cuál es tu presupuesto?
Mira objetivamente tu estado financiero actual. El término elaborado para esto sería «análisis de flujo de efectivo», pero es solo un presupuesto mensual. Observa cuánto gastas en la actualidad en cosas indispensables como la hipoteca o el alquiler de tu casa, servicios como agua y luz, alimentos y vestimenta. Agrega otros pagos mensuales, como préstamos estudiantiles, seguro de propietario, teléfonos celulares, Internet y la televisión por cable. No te olvides de incluir los impuestos locales, si los hay, que no se deduzcan de tu salario. Es importante que te dejes un respaldo aceptable para entretenimiento, vacaciones, emergencias y ahorros de jubilación.
Ahora mira los estados de cuenta de tu banco y tarjetas de crédito de los dos últimos años. Esto debe darte una idea firme sobre a dónde va tu dinero. Puedes encontrar espacios que puedes recortar o que ya están bastante reducidos.
Años atrás había una regla de oro común que se llamaba regla 20/4/10 que se utilizaba para calcular la asequibilidad propia. Eso significa realizar un anticipo del 20%, sacar un préstamo por 4 años y dedicar no más del 10% del ingreso bruto cada año al préstamo, así como al seguro del carro.
En la actualidad, eso ya no funciona. Los precios de los carros nuevos son demasiado altos para un préstamo de 3 o 4 años y los ingresos son muy escasos. Como resultado, , los compradores de autos sacan préstamos a más largo plazo para aguantar el pago mensual. El promedio del plazo en la actualidad es de 68 meses (5 años y ½ ), de acuerdo con Experian Automotive, la división de análisis de mercado de la agencia de informes de crédito Experian. Hecho espeluznante: el 28% de todos los préstamos nuevos duran de 6 a 7 años.
Los préstamos a muy largo plazo no son una idea genial, a pesar de que parezca que todo el mundo lo hace. A menos que puedas realizar un anticipo muy grande, deberás más de lo que vale el carro por muchos años. Los prestamistas llaman al período donde debes más que el valor del carro «estar de cabeza».
Si tienes que vender el auto o queda inservible antes de llegar al punto de equilibrio, acabarás haciendo pagos continuos por un carro que ya no te pertenece. Los años extras de pago también significan años extras de interés, y pueden resultar en una suma cuantiosa.
Muchas personas dan su carro en canje por el que todavía deben dinero. El concesionario que arregla un financiamiento luego traspasa la deuda del préstamo viejo al nuevo. Esto puede parecer atractivo si no puedes abonar tu carro anterior antes de venderlo.
Pero ten cuidado. En resumen, pagarás el monto adeudado del carro anterior durante todo el período del nuevo préstamo. Y ese monto estará afectado por el trato que te ofrezca la agencia de autos por el canje de tu auto viejo. Si el concesionario te otorga un pago menor por el canje, podrías estar de cabeza por mucho tiempo.
Cotiza el seguro de tu nuevo carro
Tu análisis de flujo de efectivo te dirá cuánto puedes asignar al carro cada mes. El pago mensual del préstamo debe ser considerablemente menor a eso para que también puedas cubrir gastos como combustible, mantenimiento y seguro.
Una vez que hayas elegido el carro y conozcas el precio aproximado, llama a tu agente de seguros para preguntarle el costo por agregarlo a tu póliza.
Si estuviste manejando un carro viejo hasta ahora, podrías sorprenderte de lo mucho que pueden aumentar las tasas. Lógicamente, cuesta más asegurar un carro valuado en $30,000 dólares que uno valuado en $10,000. A pesar de que hayas dejado de lado la cobertura por choque en tu carro viejo para ahorrar dinero, querrás esa cobertura en el carro nuevo. Además, es un requisito de la empresa de financiamiento en caso de que tengas un préstamo o rentes el vehículo.
Pago mensual
En lo que concierne a la elección del carro, el objetivo del ejercicio de presupuesto es determinar el pago mensual más alto que puedes realizar. Sin embargo, ese tipo de información te la guardas cuando estés negociando con el vendedor de autos.
¿Por qué guardar esa información en secreto? Porque en el momento en que el vendedor descubra el pago mensual más alto que puedes realizar, puede crear un trato que utilice cada centavo de esta cifra y, en lo posible, te querrá llevar hacia el carro más caro. La manera más fácil de hacer eso es estirar el préstamo. Eso también le da al concesionario que arregla el financiamiento el poder de crear una tasa de interés más alta de lo necesario sin que te des cuenta.
Realizar un cálculo serio de lo que puedes gastar sin problemas puede indicarte que no compres ese carro del que te enamoraste. Luego puedes considerar un carro más barato (quizá un carro usado similar) o posponer la compra hasta que hayas ahorrado para realizar un pago anticipado más grande. Otra opción es un arrendamiento (leasing).
Evaluando los pagos mensuales
¿Qué carro puede comprar un pago mensual? Muchas tablas de cálculo en línea pueden ayudarte a realizar la cuenta. Una que es especialmente muy fácil de usar es la “calculadora de asequibilidad” en Cars.com, pero existen muchas otras. Entre otras cosas, te permiten insertar el pago mensual de tu elección, junto con otras suposiciones y ver el precio total del carro que el pago financiará.
¿Qué carro puede comprar un pago mensual?
Cuando vas a comprar un carro, el concesionario por lo general intentará que fijes un precio de lo que puedes gastar en pagos mensuales. Luego realizará el trato para darte el mejor carro a cambio del pago mensual más bajo. Suena genial, ¿no? No lo es. Por supuesto, cuanto más largo sea el plazo de pago del préstamo, menos pagarás cada mes. Sin embargo, acabarás pagando más dinero por el carro a largo plazo, porque estarás abonando más intereses. Esta tabla calcula cuánto deberás pagar cada mes por un vehículo asumiendo una tasa de interés anual del 3.5%. Los compradores que pagan su vehículo en cuatro años pagan un interés del 6.8%. Aquellos que se toman cinco años pagan un interés del 8.4%. Aquellos que se toman 6 años pagan un enorme interés del 10%.