Trump prometió defender a los “olvidados” pero ha perjudicado a los trabajadores y favorecido a las corporaciones, dice AFL-CIO
WASHINGTON- Donald Trump ganó la presidencia con promesas de defender a los trabajadores “olvidados” por el sistema político pero, en su primer año en el poder, no ha hecho más que avanzar los intereses de las corporaciones y perjudicar a las familias trabajadoras, afirmó este martes el presidente de la mayor federación sindical, AFL-CIO, Richard Trumka.
En un encuentro con periodistas para evaluar el primer año de Trump en el poder, Trumka dijo que el mandatario no sólo ha incumplido sus promesas para los trabajadores sino que ha usado la presidencia para perjudicarlos, pero los sindicatos se movilizarán en los estados clave para los comicios legislativos de noviembre próximo.
“El 2017 fue un año difícil para la gente trabajadora. Las corporaciones hicieron todo en su poder para estancar los salarios, creció la desigualdad y los políticos a nivel federal y estatal lanzaron una nueva ola de ataques a nuestra dignidad y derechos”, afirmó Trumka.
Asimismo, ofreció duras críticas a Trump, a ocho días de que éste presente su primer discurso sobre el “Estado de la Unión” ante una sesión conjunta del Congreso, en la que se prevé que el mandatario destacará los logros y retos de su joven Administración.
A week from today, President Trump will give his first state of the union address. One-year into his administration, workers are disappointed and determined. pic.twitter.com/vpBQsU4aXt
— Richard Trumka (@RichardTrumka) January 23, 2018
La Casa Blanca desde siempre ha insistido en que Trump ganó porque ofrecía una alternativa para las clases media y trabajadora, y la reciente reforma tributaria ayudará a revitalizar la economía mediante la creación de empleos y mejoras salariales.
Medidas contra los trabajadores
“Las promesas incumplidas ya son malas en sí, pero el presidente Trump también ha usado su oficina para activamente perjudicar a la gente trabajadora”, sumando fuerzas con las corporaciones y sus aliados políticos “para minar el derecho de los trabajadores a la negociación colectiva”, se quejó Trumka.
Trump “nos ha sacado dinero del bolsillo y ha hecho nuestros sitios de empleo menos seguros. El ha dividido a nuestro país, ha abandonado nuestros valores, y dado cobijo al racismo y otras formas de intolerancia”, argumentó Trumka, señalando a una cartulina.
La disonancia entre lo que dijo Trump para ganar y lo que ha hecho en la presidencia es notable, según Trumka: no ha declarado que China manipula su divisa, en desleal competencia con otras economías; ha rechazado planes para revitalizar las comunidades que dependen de la industria del carbón, y tampoco ha invertido en la vetusta infraestructura del país.
Además, ha promulgado una reforma tributaria que favorece a los ricos y las corporaciones, y que alienta el continuo desplazamiento de empleos al exterior.
También ha tomado medidas contra los inmigrantes, que no son la amenaza para los trabajadores estadounidenses que pinta la Administración sino que también ellos sufren los problemas de desigualdad salarial provocados por un sistema disfuncional, continuó Trumka.
Al respecto, consideró que el reciente cierre del gobierno, provocado por una falta de consenso en torno al futuro de los “Dreamers”, habrá valido la pena si en realidad se logra una solución permanente para los jóvenes indocumentados.
Por el contrario, si el próximo 8 de febrero se produce otra crisis política y el Congreso sólo aprueba otra medida de gastos temporal, entonces habrá sido una mala estrategia, según el líder sindicalista, cuyo grupo apoya la legalización de los “Dreamers”.
The future of hundreds of thousands of working people is at stake. Tell Washington politicians to stop playing games with our freedom to join together. Text DREAM to 235246 to call Congress now! #CleanDreamAct #saveTPS pic.twitter.com/sIB95yVhSi
— AFL-CIO ✊ (@AFLCIO) January 23, 2018
Trump creó la crisis al desmantelar “DACA”, y en las negociaciones “tenemos a un presidente que está del lado de todos y de nadie”, señaló.
Trumka renunció en agosto pasado a un grupo de asesores de la Casa Blanca, y hoy aseguró que Trump es “encantador en persona”, y que el problema no es falta de acceso sino el impacto que puedan tener entidades como la suya para obtener mejoras laborales en EEUU.
“Yo diría que no nos ha ido muy bien” en la Casa Blanca, admitió.
Trumka se pronunció a favor de que EEUU se salga del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN, o NAFTA, en inglés), sino se logra un mejor acuerdo.
“El trabajador mexicano no es nuestro enemigo”, enfatizó Trumka, quien aseguró que hay espacio para un “término medio” entre EEUU, México y Canadá, y que, en todo caso, las mejoras para los trabajadores y la economía en México está en los intereses de EEUU.
Lecciones de 2016
Según Trumka, en 2016 Trump venció al resto de sus rivales para la nominación presidencial republicana y a su eventual rival demócrata, Hillary Clinton, porque los trabajadores “estaban enfadados con un sistema que no les estaba funcionando… querían a alguien que iba a cambiar las reglas del juego”.
“Le dieron una oportunidad… pero ha persistido en todo aquello que nos traido a este punto”, y si en 2017 muchos de sus votantes no han querido admitir su error al elegirlo, ahora muchos “están cruzando el puente” de nuevo a los demócratas, precisó.
Una encuesta interna de AFL-CIO en enero de 2017 determinó que, entonces, el 55% de sus miembros desaprobó a Trump y un 45% lo apoyaba. Ahora, el 63% desaprueba de su gestión, y un 37% lo respalda.
Según Trumka, el Partido Demócrata careció en 2016 de una agenda coherente y, si está claro que no bastó con ser “anti-Trump”, para este ciclo de renovación del Congreso, el partido tendrá que afilar sus estrategias para ganar con “una agenda que apele a las familias trabajadoras”.
Para este año, aprovechando el descontento popular con políticas anti-trabajadores, la AFL-CIO alista una masiva campaña de movilización de sus miembros en estados clave como Pensilvania, Ohio, Florida, Missouri, New Mexico, Arizona, Michigan e Illinois. También habrá operaciones en otra decena de estados, con el objetivo de apoyar candidatos que avancen la agenda de los trabajadores.
“Sin importar quién está en la Casa Blanca, vamos a seguir creciendo este movimiento y seguir el impulso, centrados en verdaderas victorias que conduzcan a un mejor día para la gente trabajadora de a pie en todo el país”, prometió Trumka.