Con paquete de leyes combatirán abuso sexual en NYC
Como parte del movimiento #MeToo el Concejo analizará medidas para combatir el acoso en la fuerza laboral municipal
La ciudad de Nueva York dice #MeToo, y con un nuevo paquete de leyes que se presentará este miércoles en el Concejo Municipal se une de manera más contundente al movimiento nacional para combatir el acoso y abuso sexual, que cobró fuerza en octubre del año pasado cuando varias mujeres víctimas dieron la cara y denunciaron públicamente sus casos.
El Comité sobre la Mujer y el Comité de Derechos Humanos realizarán este miércoles una audiencia conjunta en la que abordarán el acoso sexual dentro de la fuerza laboral municipal, pero también en el sector privado. El componente central de la reunión será la presentación del “Stop Sexual Harassment in NYC Act”, un paquete legislativo de 11 propuestas elaboradas por el presidente del Concejo Corey Johnson, junto a otros concejales, que busca fortalecer las políticas contra el acoso sexual de la Ciudad y luchar contra ese tipo de abuso en el lugar de trabajo.
El paquete incluye propuestas para armar a los empleados municipales con las herramientas legales que le permitan hacer de una manera más segura una denuncia, así como fortalecer el rastreo y reporte de abusos, medidas que serán extendidas a las empresas privadas.
“Con el destape de cada vez más y más casos de acoso sexual, nunca ha sido más importante para el gobierno jugar un papel en el movimiento para poner fin al acoso y abuso sexual”, señaló el presidente del Concejo, en un comunicado.
En la audiencia se escuchará a representantes de la Ciudad, específicamente de la Comisión de Derechos Humanos, el Departamento de Servicios Administrativos y la Comisión de Prácticas de Empleo Equitativo, con el fin de examinar las políticas de acoso sexual vigentes. Asimismo, se explorarán mejores prácticas que prevengan el abuso en el lugar de trabajo y se analizará cuál es el proceso que se sigue hoy para hacer denuncias.
La Ciudad cuenta con 300,000 empleados municipales y se espera que la audiencia permita conocer qué tan comunes son los incidentes de acoso dentro del gobierno local y con qué frecuencia se reportan.
“El movimiento #MeToo nos desafía a traducir su poder y valor en políticas bien pensadas y de impacto para garantizar el derecho de todas las personas a un lugar de trabajo seguro y respetable”, señaló la concejal Helen Rosenthal, presidenta del Comité sobre la Mujer y copatrocinadora de uno de los 11 proyectos de ley.
Contra la discriminación
El nuevo paquete legislativo también propone esclarecer en la Ley de Derechos Humanos que el acoso sexual es una forma de discriminación que la Comisión de Derechos Humanos tiene el poder de eliminar y prevenir
“En momentos en que tantos se levantan y dicen #MeToo, es vital que como funcionarios electos aprovechemos el momento para implementar políticas destinadas a erradicar la violencia sexual para que nadie más tenga que unir su voz en ese tipo de coro”, dijo el concejal Robert Cornegy.
Natasha Lycia Ora Bannan, abogada de la organización sin fines de lucro LatinoJustice, compartirá durante la audiencia algunos casos de mujeres que han sido blanco de acoso sexual.
“Yo espero que esta audiencia sirva para visibilizar los casos de mujeres de bajos recursos, inmigrantes, latinas, cuyas historias” quizás no han recibido la misma exposición que otras, señaló.
En enero pasado, el fiscal de distrito de Manhattan Cyrus R. Vance anunció la creación de un equipo dedicado a atender e investigar denuncias de violencia sexual laboral. Enfatizó que la línea de ayuda dispuesta para recibir denuncias (212-335-9373) estaba abierta a todos sin importar su estatus migratorio y que contaban con intérpretes para ayudar a personas que no hablan inglés. La línea de ayuda ha recibido aproximadamente 120 llamadas desde el 1 de enero.
Si bien el movimiento #MeToo despegó apenas el año pasado tras las denuncias de acoso sexual contra el productor de Hollywood Harvey Weinstein, la iniciativa fue fundada hace más de una década, en 2006, por Tarana Burke. Según el sitio web del movimiento, 17.7 millones de mujeres han denunciado abusos desde 1998.
El nuevo paquete legislativo
Propone ordenar a las agencias de la Ciudad a:
- Realizar entrenamiento contra el acoso sexual a todos los empleados para fomentar un ambiente intolerante al abuso.
- Hacer encuestas anónimas sobre el clima laboral y desarrollar e implementar planes de acción para prevenir el acoso sexual. Las agencias deberán trabajar con el Departamento de Servicios Administrativos para desarrollar planes de acción según los resultados de las encuestas y garantizar un ambiente laboral que no consienta el abuso sexual.
- Conducir evaluaciones de riesgo para prevenir el acoso sexual que permitan diseñar un plan de acción con medidas proactivas para reducir los abusos.
- Reportar quejas de acoso sexual para comunicar a los empleados que abordar y responder al abuso es una prioridad.
- Requerir que las empresas que tienen contratos con la Ciudad o buscan su financiamiento revelen sus políticas contra el acoso sexual.
Otras medidas también requieren:
- Mejorar la educación sobre acoso sexual y facilitar el proceso de quejas a través del sitio web de la Comisión de Derechos Humanos.
- Extender las protecciones de acoso sexual a todos los trabajadores de la ciudad de Nueva York sin importar el tamaño de la fuerza laboral de su empleador.
Las propuestas también alcanzan al sector privado:
- Las empresas privadas deben entrenar a sus trabajadores (incluyendo gerentes y supervisores) contra el acoso sexual.
- Las compañías deben colocar carteles de sus políticas y procedimientos contra el acoso sexual a la vista de sus empleados para que les recuerden diariamente cuáles son sus derechos y responsabilidades.
- Emitir una resolución que inste al Congreso de Estados Unidos a aprobar, y al Presidente a firmar, la ley de 2017 para Acabar con el Arbitraje Obligatorio para Acoso Sexual, dándoles a los trabajadores la oportunidad de llevar sus denuncias de acoso sexual al sistema judicial en lugar de ser obligados por sus empleadores a resolver este tipo de disputas en privado.