Sube como nunca el número de neoyorquinos durmiendo en refugios
Más de 63 mil personas dependen de los refugios públicos para no amanecer en la calle
Cada vez más personas deambulan sin techo por las calles de Nueva York Crédito: Impremedia
Hay más neoyoquinos sin hogar que nunca. El número en los refugios alcanzó 63,495 personas en diciembre, una cifra histórica en NYC, según el informe anual de la organización Coalition for the Homeless (Coalición para las personas sin hogar), divulgado el miércoles.
Ese número refiere a la cantidad promedio de personas que buscaron refugio en las noches en diciembre pasado, detalló Daily News. A ello hay que sumarle aquellos que pasan la noche en la calle.
A pesar del número récord, la Coalición no le dio a la ciudad una calificación deficiente en su manejo de la crisis de las personas sin hogar. En cambio sí cuestionó al estado de Nueva York, especialmente por su política de enviar ex reclusos al sistema de refugios para indigentes.
El proyecto “Turning the Tide” del alcalde De Blasio busca reducir en 2,500 personas la población en refugios. La Coalición le ha pedido que ayude a la gente sin hogar a través de otros de sus planes, la construcción de viviendas asequibles. Quieren que reserve al menos 10% de unidades para quienes carecen de techo.
“Ponemos la vivienda al frente y en el centro por una razón, porque en realidad es lo que sabemos que funciona”, dijo Giselle Routhier, directora de la Coalición.
La portavoz del alcalde, Melissa Grace, insistió en que la ciudad iba en la dirección correcta en materia de vivienda.
“Estamos construyendo y protegiendo hogares asequibles para las familias, incluidos los que se enfrentan a la falta de vivienda, a un ritmo récord”. Enumeró “nuestros planes de vivienda asequibles y de apoyo, la ayuda legal gratuita para los inquilinos que luchan contra el desalojo y los programas de asistencia para el alquiler. Nos dirigimos en la dirección correcta”, afirmó Grace.
“La ciudad ha hecho bastante”, dijo Routhier, citando los esfuerzos para detener los desalojos. “Al mismo tiempo, el estado no está haciendo literalmente nada para las personas que salen de la prisión y las envía directamente a los refugios”.
