Sean Penn dio una entrevista bajo los efectos de somníferos y este fue el resultado
Una polémica charla con Stephen Colbert
El paso de Sean Penn por el late-night show de Stephen Colbert ha revolucionado las redes sociales debido tanto al aspecto físico del actor como a sus declaraciones algo erráticas.
Con un atuendo informal -vaqueros, camiseta y cazadora- muy diferente a la cuidada indumentaria que suelen lucir los invitados, y con su cabellera despeinada, el oscarizado intérprete no tuvo ningún reparo en reconocer, como tarjeta de presentación, que aún se encontraba bajo los efectos de la medicación para dormir que había tomado durante un vuelo nocturno.
Nada más arrancar la conversación con Colbert, también sorprendió al público sacando una cajetilla de tabaco y poniéndose a fumar, algo que siguió haciendo a lo largo de toda la entrevista hasta que el presentador -respondiendo a la petición de la estrella para que cambiaran de tema y no le obligara a profundizar en su opinión (desfavorable) de las plataformas de streaming– le pidió que apagara su cigarrillo.
“Por favor, no sigas fumando. A mí no me importa. Mis padres fumaban cuando yo era un niño, así que asocio el olor de los cigarrillos con recuerdos felices, pero queremos tenerte por aquí durante tanto tiempo como sea posible, y esas cosas son malas para ti”, le aseguró Colbert, a lo que Sean Penn respondió con su ácido sentido del humor.
“Bueno, ofrecen seguridad laboral a los oncólogos”.
Hace unos días, el también cineasta provocaba una pequeña conmoción en la industria al revelar que ya no le interesaba la interpretación, siguiendo los pasos de otro grande del séptimo arte como Daniel Day-Lewis. Ese fue otro de los temas que no evitó abordar, ofreciendo una justificación algo más elaborada de los motivos que le han empujado a jubilarse.
“Lo mejor que puede aportar un actor a cualquier proyecto es saber colaborar con otros, y resulta que a mí cada vez se me da peor interactuar con los demás, así que cada vez me resulta menos placentero porque ese proceso me encanta cuando me encanta, pero ya no me gusta. Y por eso acabé escribiendo una novela, porque de esa forma estaba yo solo, no había nadie con quien colaborar y por tanto, en ningún momento me sentí decepcionado conmigo mismo [al no conseguir hacerlo]”.
La gira del actor para promocionar su novela -‘Bob Honey Who Just Do Stuff’- ha sido el marco perfecto para que soltara varias perlas acerca de su vida personal, como por ejemplo por qué no mantiene ningún contacto con su exmujer Robin Wright, con quien tiene dos hijos y estuvo casado más de 14 años.
“No hablamos a menudo, no nos llevamos demasiado bien. Tenemos relaciones separadas con nuestros hijos llegados a este punto, y es mejor así porque ellos ya toman sus propias decisiones. Y resulta que ella y yo no compartimos los mismos puntos de vista sobre educación, incluyendo cómo seguir educando a los hijos adultos”, reconocía a su paso por el podcast ‘WTF’ sin tratar de dramatizar la situación.
“Es mucho mejor para ella poder ser exactamente quien es y estar ahí para sus hijos. Ellos adoran a su madre y tienen un estrecho vínculo; y yo siempre estoy ahí para ellos pero… la cuestión es que siempre vamos a colisionar en cuestiones éticas”, añadía misterioso sin especificar cuáles eran esas diferencias.