¿Cuál es el mejor bloqueador solar para la familia?
Expertas explican cómo escogerlo según las normas de seguridad, las necesidades y estilo de vida
El uso diario del un protector solar es esencial para prevenir el cáncer de piel, las temidas manchas y arrugas y hasta el envejecimiento prematuro. Pero con tantas opciones que se tienen en el mercado, elegir el correcto para toda la familia puede convertirse en todo un dilema.
Para facilitarte la tarea, la Dra. Paola Rodríguez —especializada en dermatología y vinculada al Centro Médico de Kaiser Permanente en South Bay, Harbor City, California— ofrece los siguientes consejos que ayudan a tomar la mejor decisión, teniendo en cuenta las normas de seguridad, el estilo de vida de la familia y las necesidades particulares de cada uno de sus integrantes.
1. No hay un bloqueador solar perfecto. Los factores más importantes para la efectividad del bloqueador solar es aplicarlo a diario y asegurarse que proporcione un factor de protección solar (SPF) de amplio espectro. Es decir que proteja contra los rayos solares UVA y UVB, las dos formas más peligrosas de radiación ultravioleta.
2. Que tenga un SPF de 30 o más. Los estudios han encontrado que el uso apropiado de un protector solar con SPF de 30 o más bloquea el 97% de los rayos UVB, según resalta la Dra. Rodríguez.
3. Que sea resistente al agua. Este punto es especialmente importante cuando se participa en actividades físicas al aire libre o se transpira con intensidad.
“En 2012, la FDA estableció regulaciones sobre reclamos de resistencia al agua, por eso los protector solar ahora notifican en sus envases cuánto tiempo los consumidores tienen de protección. Estos dicen, ‘40 minutos’ u ‘80 minutos’ después de las palabras ‘resistente al agua’, lo cual indica cuánto tiempo se puede estar mojado o sudado antes de volver a aplicarlo”, detalla la dermatóloga.
4. A base de agua. Si alguno los integrantes de la familia es propenso al acné, se debe optar por un bloqueador con una fórmula sin aceite que no sea comedogénica. Los bloqueadores a base de agua son livianos y no obstruyen los poros de la piel. Este tipo de bloqueador solar es importante para quienes están tomando medicamentos o siguen un tratamiento contra el acné, debido a que estos pueden causar sensibilidad al sol, lo que hace que la piel esté más vulnerable a quemarse.
5. Un protector solar físico. Si alguno de los integrantes de la familia tiene la piel sensible, o es menor de dos años, se debe optar por un protector solar físico (también conocido como protector solar mineral) y evita los protectores solares químicos que pueden causar irritación y reacciones alérgicas en la piel.
Los protectores solares físicos están hechos de bloqueadores minerales, principalmente de óxido de zinc o dióxido de titanio, que son ideales para las personas de piel sensible, incluyendo los bebés de más de 6 meses, a los que se les deben aplicar protectores solares físicos que no contengan fragancia ni colorantes y que tengan la menor cantidad posible de ingredientes y conservantes adicionales.
La correcta elección y aplicación en los bebés
Los estudios señalan que el 80% de la exposición que tiene una persona a la radiación UV que daña la piel y es la culpable del cáncer se recibe antes de los 18 años. Por ello es importante que los padres modelen e implementen hábitos de protección solar en los hijos desde temprana edad, para reducir en gran medida ambos riesgos.
Esta responsabilidad, dice la Dra. Rodríguez, debe comenzar desde que el hijo está bebé, protegiéndolo de los rayos del sol de la forma más adecuada.
Trisha Calvo, experta en los investigaciones que efectúa la organización Consumer Reports (CR) en las áreas de salud y alimentos, explica que lo mejor que se puede hacer para proteger a un bebé menor de 6 meses de los rayos del sol es mantenerlo fuera de ellos, especialmente entre las 10 a.m. a 4 p.m., cuando estos están más intensos.
“Por supuesto que esto no siempre es práctico”, denota Calvo. “Así que lo mejor es mantener [al bebé] en la sombra, usando un amplio toldo o sombrilla para protegerlo del sol y vestirlo con camisa y pantalón de manga larga, de una tela liviana y fresca, y un sombrero de ala ancha que proteja su rostro, orejas y cuello”.
Si el menor tiene más de 6 meses, la Academia Estadounidense de Dermatología recomienda usar “los protectores solares que contienen dióxido de titanio u óxido de zinc (conocidos como los bloqueadores solares minerales), que son menos propensos a irritar la piel sensible de un bebé”. También son seguros los que contienen otros compuestos, como la oxibenzona.
El bloqueador en aerosol
Una pregunta común es si se puede o no usar los protectores solares en aerosol en niños menores de 5 años. Calvo dice que CR no recomienda el uso de este tipo de bloqueadores solares en los niños por varias razones de seguridad.
“[Por su consistencia y aplicación en spray] puede ser difícil saber si todos los espacios de la piel quedan cubiertos y qué cantidad real queda sobre la piel, debido al factor del viento o la brisa”, detalla la experta.
También existe el riesgo de irritación pulmonar cuando se inhala el aerosol, así como de sufrir quemaduras si el menor se acerca demasiado a una fogata o parrilla prendida cuando el bloqueador en aerosol que se le roció sobre su piel no está seco por completo. Este último problema se presenta porque, como explica Calvo, los filtros solares en aerosol son inflamables.
“Si decide aplicar un aerosol a su hijo, la mejor manera de hacerlo es rociarlo en las manos y frotarlo en la piel del niño”, apunta la experta. “Ningún niño ni adulto debe rociarlo directamente en el rostro. Hay que rociarlo en las manos y aplicarlo en la cara”.