La moda de regalar strippers “para quedar bien con las mujeres” en México
Los escándalos en lo que han estado involucrados los funcionarios
MEXICO.- Los payasos, bailes y actores cómicos son cosa del pasado. La moda en algunos sectores públicos y privados para complacer a las mujeres en espectáculos masivos apuesta en los últimos años a los strippers: hombres jóvenes, fuertes y dispuestos a quedarse medio en cueros, dejarse tocar y, en casos extremos, tener sexo.
En uno de los últimos eventos — revelados en redes sociales aunque se calcula que un alto porcentaje se queda en el anonimato— el presidente de Fundación Las Américas, Héctor Eduardo Gutiérrez, llevó a un par de animadores vestidos con sensuales taparrabos para celebrar a un grupo de mujeres el Día de las Madres en Ecatepec, en la zona conurbada de la capital mexicana.
Durante la celebración, los strippers bailaron e incluso hicieron una dinámica de juegos con las mujeres a las que dividieron en dos grupos que llamaron “Las Cachondas’’ y “Las Calientes’’: ambos nombres con connotación sexual.
Para justificar el show y la polémica que se desató posteriormente, Gutierrez dijo que quería darle a ellas “un oasis para que sientan que no todo pueden ser problemas, tráfico, conflictos y cosas negativas”, afirmó. “Ellas querían algo diferente: muchas tienen problemas de violencia en el matrimonio’’.
Situación similar se vivió dos años atrás en la primaria 20 de Noviembre en Tampico, Tamaulipas, donde se tomaron fotografías para denunciar en Facebook que el dinero de los padres de familia se gastaba en espectáculos que “no corresponden a una institución educativa’’ (bailes eróticos de los hombres).
Los denunciantes argumentaron que, si bien no estaban en contra, debió hacerse en un casino o restaurante, no en una escuela, delante de los niños.
La popularidad de estos espectáculos es tal que, ante la proximidad de los festejos del Día de las Madres de este año, el director de Educación de Ciudad Madero tuvo que prohibir explícitamente la presencia de bailarines en estos eventos. Dijo que “era una falta a la moral y a las buenas costumbres’’, según documentó el diario local El Mañana.
Para Xiadani Flores, feminista e investigadora de temas de género en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) el problema va mucho más allá de la moral e incluso de la liberación femenina.
“De alguna manera estos espectáculos son una forma de contrarrestar la ideología que predomina en los hombres que creen que las mujeres sólo son amas de casa que limpian, hacen de comer y cuidan a sus hijos’’, advirtió.
“Sin embargo, estas actitudes no son correctas para erradicar el patriarcado ni liberar a la mujer pues son la reproducción de la misma práctica cosificante del ser humano y definitivamente no es la mejor forma de hacer política para congraciarse con las mujeres’’.
El voto femenino con 46. 2 millones que representan el 52% del padrón total de electores en México frente a 42. 9 millones de hombres se ha vuelto un asunto cotizado por lo que los políticos apuestan a estrategias cada vez más creativas y sofisticadas: desde la promesa de subsidios a strippers.
En diciembre pasado, dos regidores del municipio de Parras Coahuila María del Roble Ortiz y Javier Molina, fueron acusados de organizar una recaudación de fondos con un show “solo para mujeres’’ por el que cobraron alrededor de siete dólares (en su equivalente en pesos) que terminó con un espectáculo de sexo en vivo videograbado por las asistentes y las cámaras de video del salón.
Dos años antes, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Veracruz festejó también el Día Internacional de la Mujer con un desayuno y un show de striptease protagonizado por 12 policías quienes vestidos con botas, pantalones ajustados y boina, bailaron al ritmo de reggaeton para congraciarse con 1, 500 mujeres del municipio Emiliano Zapata.
“Se habla de “regalar” strippers a las mujeres porque tienen el derecho a divertirse, a salir de su rutina pero tanto hombres como mujeres se equivocan al pensar que esos espectáculos los va a hacer superiores al otro genero’’, insiste la analista Flores.
