Naya Rivera finaliza su polémico divorcio con Ryan Dorsey
Es oficial, la sexy actriz está soltera
Los actores Naya Rivera y Ryan Dorsey están a partir de este jueves legalmente divorciados, según confirman los documentos pertinentes de los juzgados de Los Ángeles a los que ha tenido acceso el portal The Blast.
La de la ya ex pareja ha sido una separación larga y complicada que comenzó a finales de 2016, cuando ella solicitó por primera vez el divorcio dos años después de pasar por el altar en una boda que no estuvo exenta de polémica, ya que meses antes la antigua protagonista de ‘Glee‘ había protagonizado una muy mediática ruptura con su entonces prometido Big Sean. De hecho, las malas lenguas aseguraron entonces que la artista habría aprovechado incluso el vestido que ya había elegido para el enlace con el rapero que nunca llegó a celebrarse.
En un nuevo giro de los acontecimientos, en diciembre de 2017 Naya solicitó que se cancelara el proceso, aunque en aquella ocasión ya se especuló con que esa decisión se debería más a motivos puramente financieros que a una posible reconciliación del matrimonio, que tiene un hijo en común de dos años.
El altercado que Ryan y Naya protagonizaron apenas un mes más tarde en las calles de la localidad de Chesapeake, durante el que ella intentó agredir a su ex y le golpeó repetidas veces en presencia de su retoño, vino a confirmar que su ruptura era definitiva.
Sin embargo, los cargos por agresión contra la estrella fueron desestimados y archivados en gran parte gracias a la negativa del propio Ryan a litigar contra la madre de su pequeño y a presentarse como parte de la acusación. Esa actitud respaldaba lo que ambos habían asegurado en el primer comunicado con que anunciaron su separación, que seguirían respetándose y formando una familia por el bien de su bebé, algo que han demostrado de nuevo en el acuerdo por la custodia de su hijo que acaban de firmar.
Los dos ex se han comprometido a compartirla, dividiendo a partes iguales el tiempo que pasen con él en vacaciones y otras festividades, y a consultarse o tomar juntos todas las decisiones relativas a su educación, salud o bienestar.
Aunque ha tardado, parece que por fin las aguas vuelven a la calma en la vida de la polémica actriz y cantante.
