Rechazo de gobierno de Trump a mujeres en lactancia encuentra resistencia de Nueva York

Representantes federales y de la ciudad convocaron un acto en contra de la postura de la administración federal

Una madre amamanta a su hijo en un restaurante

Una madre amamanta a su hijo en un restaurante Crédito: WIC Image Gallery

NUEVA YORK – Cuando parecía que la administración del presidente Donald Trump no podía poner en su contra a nuevas minorías, lo hizo con las mujeres que acaban de ser madres y quieren amamantar a sus hijos sin complejos.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) defiende este acto natural para la salud de los bebés. Este organismo internacional de referencia y Unicef actualizaron sus recomendaciones en abril, pero la negociación para establecer una nueva resolución sobre la lactancia materna encontró la oposición de Estados Unidos en algunos detalles y surgió la polémica.

Los representantes de Estados Unidos trataron de eliminar mensajes como el de “proteger, promover y apoyar la lactancia materna” y otro donde se llamaba a las autoridades a restringir la promoción de productos alimenticios infantiles que los expertos consideran pueden perjudicar a los pequeños.

La Dra. Denise Núñez, pediatra y  fundadora de la Fundación Niño de la Caridad en El Bronx, explicó en este periódico por qué es beneficioso amamantar a los bebés.

En Nueva York retan postura federal

Madres que amamantan a sus hijos y personas que apoyan la causa se reunieron el lunes en el ayuntamiento de Nueva York para anunciar su oposición a la postura de la administración Trump.

Representantes del partido demócrata, el concejal Robert Cornegy y la congresista Carolyn Maloney, acompañaron la campaña. Maloney ya trabajó para que los estados invirtiesen más dinero en el fomento de la lactancia materna con la introducción del denominado Derecho al Acto de Amamantar y otras medidas de fomento.

El concejal Robert Cornegy abrió la primera estación de lactancia pública del estado de Nueva York, estaciones que también fueron inauguradas en la ciudad de Nueva York.

Un estudio publicado en el año 2016 en la prestigiosa revista The Lancet reveló que hasta 800,000 muertes infantiles al año se podrían evitar con la lactancia materna. Esto supondría, además, un ahorro de $300,000 millones de dólares al año en costes sanitarios derivados.

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