Evangeline Lilly revela que fue acorralada para desnudarse en ‘Lost’
Así fueron las polémicas escenas
Las seis temporadas de ‘Lost’ en las que dio vida a la superviviente Kate Austen convirtieron a Evangeline Lilly en una estrella con una leal base de seguidores mucho antes de que el universo Marvel o Peter Jackson con su franquicia de ‘El Hobbit’ se cruzaran en su camino.
La producción de la ABC supuso su primera gran oportunidad a nivel profesional y le permitió pasar varios años trabajando bajo el sol de Hawái donde rodaban, pero no todo fueron buenos momentos detrás de las cámaras.
La actriz recuerda al menos dos ocasiones concretas durante las que acabó hecha un mar de lágrimas tras verse acorralada y presionada para que accediera a realizar un desnudo parcial al que ella no había dado su visto bueno de antemano.
“Durante la tercera temporada, tuve una muy mala experiencia en el set. En resumen, me acorralaron para que hiciera una escena que incluía un desnudo parcial y yo sentí que no tenía ni voz ni voto en todo el asunto. Me sentí mortificada y para cuando acabamos estaba temblando y llorando. Y para colmo, justo después tenía que grabar una escena formidable, que requería mucha fortaleza”, ha recordado la intérprete a su paso por el podcast ‘The Lost Boys’.
Aquella horrible experiencia sirvió al menos para que la entonces joven artista aprendiera la lección y se atreviera a imponer ciertos términos o condiciones en la siguiente ocasión en que la abordaron para preparar una secuencia similar, pero para su indignación el equipo se negó a escuchar ninguna de sus peticiones.
“En la cuarta temporada apareció otra escena en la que Kate se desnudaba y luché muy duro para tener el control sobre ella y fallé estrepitosamente. Y me dije: ‘Ya está, no más. Podéis escribir lo que os dé la gana, porque no pienso hacerlo. Jamás volveré a quitarme la ropa en esta serie’. Y así lo hice”.
Los encontronazos de Evangeline con productores y guionista no giraron solo en torno a su negativa a desnudarse.
El rumbo que tomó la historia de su personaje, y en concreto el triángulo amoroso que protagonizó con Jack Shephard (Matthew Fox) y Sawyer (Josh Holloway) la llenaban de frustración y le llevaron a perder los nervios en más de una ocasión mientras leía los guiones del siguiente episodio.
“Al principio ella era… digamos que genial, pero según iba evolucionando la trama se volvió más y más predecible y odiosa. Me parece que pasó de tener su propia historia, su propia trayectoria y planes, a dedicarse a seguir a los hombres por toda la isla y eso me enfadó muchísimo”, reconoce. “Quería que fuera mejor, porque era un icono de autonomía y fuerza para las mujeres, y estoy segura de que podríamos haberlo hecho mejor”, lamenta sobre la increíble oportunidad que perdieron de mostrar a una heroína con defectos pero con determinación, que ella no duda que podría haberse ganado igualmente el cariño de la audiencia.