Alerta por envenenamiento de mascotas en Brooklyn

Varias mascotas enfermas y muertas tras mucho sufrimiento han sido reportadas en vecindarios del sur de Brooklyn.

Aparentemente es el resultado de que alguien usara un veneno para manejar de forma ilegal un problema con gatos callejeros, denuncian residentes y defensores de los animales, quienes advierten de daños a la salud de las mascotas y sus dueños.

“Se desangró completamente”, dijo un residente, que no quiso dar su nombre a Pix11, sobre una perra joven que murió el fin de semana pasado. “Tuvo una muerte muy dolorosa”.

Muchos residentes han confirmado que Mill Basin y los vecindarios adyacentes Bergen Beach y Marine Park tienen docenas de gatos callejeros corriendo por las calles. Algunos se apiadan y los alimentan. Pero alguien evidentemente trata de lidiar con ellos de una manera peligrosa.

“Están envenenando a los gatos”, agregó. “He visto gatos muertos y fluido anticongelante en la esquina”.

El fluido verde brillante es altamente tóxico, pero puede ser muy atractivo para los gatos y otros animales. Parece que alguien está vertiendo pequeños charcos en la comunidad y en extensiones de hierba donde se congregan los perros y sus dueños. A las mascota “les encanta el olor” y el sabor de ese veneno, comentó la vecina.

Algunos han podido salvar a sus perros. “Actuar rápidamente es lo mejor”, dijo el Dr. Martin Kopel, de Animal Clinic Marine Park.

El remedio legal para lidear con gatos callejeros es un método llamado en inglés TNR: atrapar, castrar, liberar, según el grupo de defensa de animales “Lost and Found Pets in Brooklyn”.

Ese sistema no sólo asegura que los gatos salvajes típicamente fértiles y territoriales no se reproduzcan, sino que también los mantiene en su hábitat elegido.

El Departamento de Agricultura y Mercados del Estado de Nueva York regula los casos de intoxicación animal. Sus estatutos estipulan que ese delito conlleva una pena de hasta un año de prisión y/o una multa de mil dólares.