Una pareja de Wisconsin se compromete gracias al sobrino
El momento de pedir matrimonio es tan especial para algunas parejas que idean el momento perfecto para que el sí sea la única respuestas posible
Aunque uno esté seguro de la pareja que tiene al lado, siempre da vértigo pensar en pedir matrimonio. ¿Y si dice que no?
Por eso, algnas personas pueden tomar semanas, sino meses, para planificar una propuesta de matrimonio. Tiene que ser perfecta, ya que puede ser uno de los momentos más grandes en la vida de cualquiera.
Sin embargo, algunos se dejan llevar más por el momento y deciden hacerlo de repente, llevándose por la improvisación. Eso es lo que hizo Kevin Sullivan, de 30 años, de Wisconsin.
Aunque Kevin sabía dónde y cuándo quería arrodillarse para hacer la gran pregunta, todavía no estaba seguro de cómo le pediría a su novia, Aubry, que se casara con él.
Lo pensó un poco tan solo, llegando a la conclusión de que lo haría en una pequeña tienda de helados y dulces, llamada The Ranison. Kevin sabía que la ubicación sería perfecta porque él y Aubry tuvieron su primera cita allí hace dos años. ¡Que dulce!
Sin embargo, quería añadir algún detalle especial, así que le preguntó a su sobrino Liam, de tan solo cuatro años, si podía ayudarlo.
De hecho, fue él quien hizo la pregunta. Eso sí es una gran que se guardó bajo la manga para ganar la partida!
El niño fue corriendo hacia Aubry y le dijo:
“Por favor, ¿puedes casarte con mi bubba?”. Aubrey, por suerte, dijo que sí.