Pelosi asegura nominación para volver a presidir Cámara Baja; promete combatir la corrupción y Trump amenaza

En 2007 fue la primera mujer en la historia en llegar a la Presidencia de la Cámara Baja de EEUU

Nancy Pelosi logró ayer la nominación para volver a presidir a partir de enero la Cámara de Representantes, después de que en las pasadas elecciones legislativas su Partido Demócrata recuperase la mayoría que perdieron hace ocho años.

“¡Espero continuar nuestro trabajo para crear un Congreso más abierto y transparente comprometido a trabajar con #Las Personas para combatir la corrupción, reconstruir la infraestructura de Estados Unidos y reducir los costos de los medicamentos recetados!”, afirmó Pelosi vía Twitter al cierre de la elección.

Casi al mismo tiempo, el mandatario Donald Trump lanzó una advertencia a los demócratas si deciden investigarlo desde el nuevo Congreso: desclasificaría documentos que serían “devastadores” para sus oponentes.

El mandatario republicano ya había expresado en varias ocasiones que considera a Pelosi como la persona idónea para ocupar el cargo.

Pelosi, veterana política de 78 años, obtuvo 209 votos a favor y 32 en contra. Además hubo tres votos en blanco y una ausencia, en la elección que transcurrió ayer a puerta cerrada.

“Creo que ha sido una buena tarde”, dijo la legisladora californiana sonriente ante los periodistas tras lograr el apoyo demócrata y superar la oposición de algunos miembros rebeldes de su bancada que querían una cara nueva en el liderazgo.

“Nuestra diversidad es nuestra fortaleza, pero nuestra unidad es nuestro poder, y usaremos ese poder de nuevo de una forma unificadora para nuestro país”, declaró Pelosi, citada por EFE.

La congresista, que ya lideró la Cámara Baja entre 2007 y 2011, deberá afrontar el voto definitivo el próximo 3 de enero. Para convertirse en presidente necesitará al menos 218 votos, por lo que debería ganar más adeptos en su partido o entre los republicanos.

Los 32 votos ayer en contra de Pelosi serían suficientes para evitar que se haga con la presidencia de la cámara si no asegura el apoyo republicano.

Para ser elegido presidente se necesita el apoyo de la mayoría de los legisladores que haya en ese momento en el hemiciclo, un umbral que podría llegar hasta los 218 votos; aunque Pelosi podría ganar con menos, como ha ocurrido en el pasado si hay legisladores que se abstienen.

Sobre las dudas dentro de su partido, Pelosi urgió a los demócratas a recordar lo que supone haber recuperado el control de la Cámara Baja. “Tomémonos un momento para asimilar el hecho de que somos la mayoría. Mayoría. Mayoría. Mayoría”, remarcó.

Brian Higgins, representante demócrata por Nueva York que apoyó ayer a Pelosi tras haber expresado previamente su rechazo, reconoció que “hay muchos puntos de vista distintos, incluso dentro de los demócratas” y destacó la importancia de un debate abierto.

Kathleen Rice, también representante por Nueva York, se quejó en un comunicado. “Desafortunadamente, nuestras inquietudes fueron rechazadas totalmente”.

La californiana se convirtió en 2007 en la primera mujer en llegar a la Presidencia de la Cámara Baja de EEUU, pero en las legislativas de 2010 los demócratas perdieron la mayoría ante los republicanos y Pelosi pasó a ser líder de la minoría.

El mayor logro legislativo de Pelosi durante su presidencia fue la reforma sanitaria de 2010, conocida como Obamacare.

Durante la jornada de ayer, los demócratas también eligieron a quien será su “número dos” en la Cámara Baja, Steny Hoyer; y al tercero en el rango, James Clyburn.

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