AMLO venderá flota de camionetas blindadas pertenecientes al gobierno de Enrique Peña Nieto
Solo se conservarán tres camionetas sin blindaje para el uso de traslado a otros estados, pero AMLO seguirá usando su Jetta blanco para andar por las calles de la ciudad
Lo llamó un "tianguis" de autos Crédito: Getty Images
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ordenó que la flota de camionetas blindadas pertenecientes al equipo del ex-presidente Enrique Peña Nieto fueran trasladada al estacionamiento del Palacio Nacional para armar un “tianguis” de autos y subastarlos, reportó el diario mexicano El Universal el pasado viernes.
La venta de camionetas, en su mayoría modelos de lujo SUV, pretende recaudar fondos para el plan de austeridad que el presidente propuso durante su campaña electoral. Sin embargo, tres de estos vehículos, los cuales no están blindados, serán asignados para el uso del equipo del presidente y su traslado a otros estados, aunque el la administración de AMLO señaló que el presidente izquierdista seguirá siendo visto en su icónico Jetta blanco sin blindaje.
“Vamos a tener dinero porque primero como ya no se están robando lo que se robaban de gasolina, ¿imagínense cuánto podemos sacar nada más de las camionetas? Además, van a haber interesados porque traer una camioneta de esas va a dar caché, no solo es el precio comercial sino va a tener otro valor”, afirmó el Presidente en su conferencia matutina del lunes 21 de enero.
El mandatario también comentó que entre las camionetas de lujo que serán subastadas hay un modelo muy extravagante de auto sedán.
Según reporta El Universal, los autos no se venderán a cualquiera debido a sus características especiales. Por ejemplo, su peso adquirido debido al blindaje, el que puede aumentar aproximadamente 331 libras a un vehículo y afecta su garantía con el fabricante debido a que el extra peso desgasta el auto más rápidamente.
Plan de austeridad de AMLO
El plan de austeridad de AMLO ya ha hecho muchos cambios radicales en la administración presidencial y en las costumbres de políticos mexicanos.
Desde su toma de poder en diciembre, el jefe de estado ha propuesto un recorte salarial de funcionarios públicos que redujo su propio sueldo un 60%. También, el presidente puso en venta un avión presidencial que fue comprado por la administración del ex-presidente Felipe Calderón y que costó 875 millones de pesos.
El objetivo central es terminar con lo que López Obrador define como “abusos, excesos y dispendio” en el uso del erario, explicó BBC.
El plan también cancela la compra de vehículos nuevos o de lujo, una costumbre al inicio de todos los gobiernos del país.
Suspende además los bonos y prestaciones especiales, desaparece el gasto para seguros médicos particulares, prohíbe los viajes al extranjero sin permiso o justificación y reduce al mínimo los recursos para ese propósito.
Tampoco se podrá usar aviones o helicópteros privados, y se cancelan además las comidas, cenas o viajes pagados por contratistas.
