Emma Coronel, esposa de “El Chapo”, y cómo pasó de ser la “diva” del juicio a supuesta conspiradora
“No todo lo que brilla es oro”, dice un refrán
Emma Coronel, esposa de Joaquín “El Chapo” Guzmán, pasó de ser una figura pública con aires de Kim Kardashian a una posible criminal.
Con toda la prueba sometida por la Fiscalía y la entrega del caso ante el juez Brian Cogan de la Corte Federal del Distrito Este de Brooklyn, en Nueva York, la percepción general de la mexicana por parte de los que siguen el “juicio del siglo” parece haber cambiado y no a su beneficio.
Atrás quedaron los días en que los medios destacaban su entrada al tribunal como si se tratara de una pasarela de moda y belleza.
La popularidad de Coronel le sumó en cuestión de dos meses (el juicio inició el 5 de noviembre pasado) miles de seguidores en la cuenta que se le atribuía en Instagram –sobre 600,000. Temprano este martes, el perfil aparecía como no disponible, y algunos medios identificaban otra cuenta como la oficial.
A Coronel hasta le consiguieron en redes una doble, la mexicana Vanessa Gurrola, y el artista italiano Alexsandro Palombo la convirtió en una de las principales protagonistas de su serie de dibujos animados de arte pop al estilo de “Los Simpsons”.
Pero hoy las fotos en redes de sus lujos, sus atuendos y hasta sus salidas, parecen haber pasado a un segundo plano en vista de las alegaciones criminales en corte que la implican.
Y es que aunque la duda sobre su vinculación en los supuestos negocios ilícitos de su marido siempre ha sido tema de debate, ahora lo más que destaca en redes son las presuntas intervenciones de Coronel para facilitar, en el 2015, la segunda fuga de su esposo, exlíder del cartel de Sinaloa, del penal El Altiplano, tal y como relató el exsocio de Guzmán, Dámaso López Núñez, alias “El Licenciado”.
El juicio contra “El Chapo” está en la recta final y lo que muchos se preguntan ahora – más allá de la posibilidad de una cadena perpetua a El Chapo – es lo que le espera a Coronel, una vez finalicen los procedimientos. Expertos han anticipado que las autoridades podrían iniciar una pesquisa contra la mexicana, madre de las gemelas de Guzmán.
En una reciente entrevista con la cadena Telemundo, la esposa de El Chapo negó estar involucrada en algún delito.
La entrevistada dijo que sus ingresos provenían de negocios legales como tierras de riego. Acto seguido, dijo que prefería no hablar de eso.
Pero los testimonios en la corte federal siguen restándole credibilidad a Coronel.
López Núñez no fue el único testigo que implicó a la joven en movidas nebulosas.
El agente el FBI Stephen Marston habló sobre los mensajes de texto entre Coronel y el acusado que el encargado de las comunicaciones internas del cartel, el colombiano Cristian Rodríguez, les entregó a los estadounidenses mediante un un sistema encriptado.
En uno de los intercambios del 22 de febrero del 2012, el sinaloense le pidió a su esposa zapatos talla 7, pantalones, y hasta tinte para su bigote. Ese día, El Chapo escapó de una redada que autoridades mexicanas y estadounidenses hicieron en su casa de Cabo San Lucas.
“Todo ocurrió muy rápido”, fue lo que supuestamente envió por mensaje Guzmán a Coronel en referencia al operativo del que huyó al ver a policías golpeando la puerta de una casa vecina
“Oh, querido, eso es horrible”, habría sido la respuesta de la mujer, según el testimonio del agente.
Otra prueba que desfiló en corte confirmando lo que es un secreto a voces fueron las declaraciones de una de las amantes de El Chapo, Lucero Guadalupe Sánchez o la “Chapodiputada”.
Los detalles de la relación extramarital del acusado con Sánchez, que incluyen hasta una carta romántica, no es precisamente lo que una mujer quiere escuchar en sala en medio del juicio contra su esposo.
Pero a Coronel le tocó; y, aunque reportes de medios, la describen sonriente y hasta burlona en medio del relato, en este tema también asoma la duda…