Nueva unidad contra el acoso castigará a empleadores abusadores
Comisión de Derechos Humanos se encuentra investigando 180 casos de acoso en Nueva York
Un día, hace 19 años, la vida de Daniela Contreras cambió. Lo que debió haber sido un día más de trabajo terminó marcándola para siempre. Hoy, a sus 35 años, la mexicana recuerda cómo su jefe acosó sexualmente de ella cuando tenía solo 16 años, sin embargo, debido a su estatus migratorio y el miedo a no ser escuchada, prefirió callar.
Contreras, quien llegó a Nueva York cuando tenía 11 años, vivió una aterradora experiencia que aún es difícil de recordar. El trauma se apoderó de ella durante años, sin embargo, el auge del movimiento Me Too en Hollywood, la impulsó a compartir su historia en una serie especial de audios sobre experiencias de asalto sexual.
“Yo no podía creer que un hombre se aprovechara de una niña, porque sabía que yo no iba a decir nada porque no podía hablar el idioma y porque sabía que necesitaba el dinero”, relató Contreras, quien recalcó que, parte de la dificultad, radica en que muchas mujeres víctimas de acoso sexual por parte de sus empleadores son indocumentadas.
“Hay muchas que no saben quien las puede ayudar”, indicó la sobreviviente neoyorquina, quien, años después de su experiencia finalmente encontró “una mano amiga” en la Alianza de Trabajadores Domésticas (NDWA), un grupo fundado en 2007 que trabaja por el “respeto, reconocimiento e inclusión en las protecciones laborales para los trabajadores domésticos”.
Contreras hoy divide su tiempo entre su hija y las labores como organizadora comunitaria de la NDWA en Nueva York, donde asegura, es vital que las trabajadoras domésticas se conecten con personas que puedan ser sus aliados en la búsqueda de justicia.
“El miedo es real para estas mujeres que, en muchos casos, son indocumentadas y necesitan mantener sus trabajos”, apuntó la mexicana. “Además de que venimos de una sociedad muy machista que nos hace pensar que el acoso es permitido y no debería ser así. Necesitamos más protección”.
Y es que, pese a que la Gran Manzana ya es hogar de uno de los paquetes legislativos más fuertes contra la discriminación y el acoso en toda la nación, a través de la conocida Ley de Derechos Humanos de la Ciudad de Nueva York, el acoso sexual en lugares de trabajo es más común de lo que se cree.
“Es una lucha constante porque muchas no denuncian por miedo a que no les crean”, declaró la mexicana. Sin embargo, el lanzamiento de una nueva unidad contra este delito se prepara para combatir a los empledores que se niegan a detener sus acciones contra sus trabajadores, sobre todo contra inmigrantes.
Trabajar en Estados Unidos sin documentos, y sin saber el idioma, ya es un reto enorme para muchos, pero para quienes hacen parte de dos industrias específicas en las que se emplean en su mayoría inmigrantes, la situación se ha tornado aún más complicada.
Actualmente, hay más de 700,000 trabajadores agrícolas y más de 2 millones de trabajadores domésticos. Según la Human Rights Watch, es en estos dos grupos donde más casos de acoso se han reportado en los últimos 20 años.
Lucha contra el acoso sexual
La Unidad de Lucha contra el Acoso basada en el Género, parte de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad, fue presentada recientemente por el alcalde Bill de Blasio, quien explicó que su misión será intervenir e investigar con mayor eficacia las denuncias de acoso sexual y de género en los lugares de trabajo.
“Los lugares de trabajo deben ser entornos seguros y de apoyo que estén libres de acoso”, dijo de Blasio, quien agregó que el ente se encargará de escalar los casos de alta prioridad más rápidamente, “reduciendo así los casos de represalias, como la pérdida de empleos u otras acciones adversas, y la identificación del acoso generalizado dentro de entidades”.
“Esta nueva unidad ayudará a la Ciudad a duplicar su compromiso de investigar casos y ayudar a hacer justicia a todos los neoyorquinos que han sido víctimas de acoso en el lugar de trabajo”, apuntó el líder político.
Junto con el lanzamiento de esta nueva unidad, la Comisión también confirmó la incorporación de las definiciones de identidad de género en la orientación legal con respecto a la discriminación en base a la expresión de género, con términos actualizados como transgénero e intersexual.
Para Cecile Noel, comisionada de la Oficina del Alcalde para poner fin a la violencia doméstica y la violencia de género, la creación del ente “fortalece el liderazgo audaz de nuestra administración en estos temas importantes”.
“Espero colaborar con la unidad y explorar formas en que podamos trabajar colectivamente para abordar el acoso por motivos de género en la ciudad de Nueva York”.
Y es que, aunque la Ciudad ha venido fortaleciendo sus esfuerzos contra el acoso en los lugares de trabajo, las denuncias de acoso sexual y de género han seguido aumentado en los últimos tres años. Según cifras de la Comisión de Derechos Humanos, de las 117 denuncias presentadas en 2017 por discriminación de género en el lugar de trabajo, 56 incluyeron una denuncia de acoso por motivos de género en comparación con 48 en 2014.
“Dado que los informes sobre acoso sexual y de género siguen llegando desde todos los rincones de la ciudad, la necesidad de una intervención rápida no podría ser más crucial”, destacó Carmelyn P. Malalis, comisionada de Derechos Humanos de Nueva York, quien recalcó que actualmente su equipo se encuentra investigando 180 denuncias de acoso por motivos de género en lugares de trabajos.
Cambios en la Ley de Derechos Humanos
Malalis explicó que las víctimas de acoso sexual, que con frecuencia experimentan discriminación adicional por raza, estatus migratorio o acoso por discapacidad, a menudo tienen miedo de denunciar, por temor a perder su empleo o, peor aún, a que no les crean.
“Esta nueva unidad permitirá a la Comisión abordar inmediatamente el acoso y las represalias en curso y eliminar el acoso generalizado de manera más efectiva”, indicó la funcionaria, quien agregó que, en virtud de la Ley de detención del acoso sexual, firmada por el alcalde de Blasio en mayo pasado y ejecutada por la Comisión, el plazo de prescripción para presentar casos en la Comisión se extendió de uno a tres años.
El cambio es de vital importancia para que “se haga justicia en todas partes”, resaltó Malalis, debido a que, con la ampliación en la jurisdicción de la Ley, también se incluyen a todo tipo de empleadores, sin importar el número de empleados, requiriendo así que pongan carteles con la ley en los lugares de trabajo.
Además, de ahora en adelante la Ley también exige que los empleadores con 15 o más empleados proporcionen capacitación sobre el acoso sexual a los empleados. Una de las primeras será dictada por la misma Comisión a través de su página web, donde, en abril próximo, empleadores de toda la ciudad podrán hacer parte del curso virtual que les servirá de guía para lo que deberán hacer en sus lugares de trabajo.
Para Lorelei Salas, comisionada del Departamento de Asuntos del Consumidor de la Ciudad, esta nueva unidad es una “adición crucial” a los continuos esfuerzos de la Ciudad por proteger a los trabajadores, especialmente a aquellos que podrían ser más vulnerables al acoso en el lugar de trabajo”.
¿Cómo encontrar ayuda?
- Si usted cree ser víctima de acoso por motivos de género o cualquier otro tipo de discriminación en virtud de la Ley de derechos humanos de la Ciudad de Nueva York, llame a la línea de información de la Comisión al 718-722-3131. Los informes también pueden presentarse de forma anónima e informarse en el sitio web de la Comisión.
- Puede comunicarse con la Alianza de Trabajadoras Domésticas en Nueva York llamando a la línea 917-412-1810.
Acoso en lugares de trabajo:
- De las 117 denuncias presentadas en 2017 por alegaciones de discriminación de género en el lugar de trabajo, 56 incluyeron una denuncia de acoso por motivos de género en comparación con 48 en 2014.
- La Comisión está investigando actualmente 180 reclamaciones de acoso por motivos de género en el lugar de trabajo.