“El Cristo en la cruz” del Lago Michigan tiene una trágica historia de fondo
La figura a veces se deja ver y otras no
Una imagen de Jesucristo en la cruz ha “iluminado” a decenas de visitantes que hacen fila para verla.
Se trata de una estatua de mármol de tamaño natural, de unos 11 pies y 1,850 libras, en Little Traverse Bay en el pueblo de Petoskey, en una parte del Lago Michigan.
Más de 2,000 personas acuden a la zona diariamente para intentar ver la efigie, pero la oportunidad depende de las condiciones del tiempo y que las temperaturas no estén muy bajas.
Este pasado sábado, por ejemplo, el agua se congeló y trabajadores tuvieron que hacer un hoyo en el hielo para que el Cristo se dejara ver.
Pero la figura sumergida tiene de fondo una trágica historia. Medios nacionales reportaron que todo comenzó en Italia. La escultura fue creada en ese país por los parientes de un menor de 15 años que murió en un accidente en una finca cerca de Bad Axe, Michigan, en 1956.
Sin embargo, la familia, cuya identidad se desconoce, recibieron notificación de que el crucifijo se estropeó y pidieron que se hiciera uno nuevo.
El Cristo que descartaron es el de Petoskey que fue, posteriormente comprado por el miembro de un club de buceo local que lo dejó en la zona en recordación de un buzo que se ahogó en el cercano Torch Lake.