El bar más viejo de Queens lucha por llegar a los 200 años
La taberna, que nunca ha cambiado de ubicación, abrió por primera vez en octubre de 1829 en Woodhaven
Neir’s Tavern, el bar más viejo de Queens y activo desde antes de la Guerra Civil, podría estar viviendo los últimos años de su larga historia.
Un comité para planificar la celebración el próximo octubre de los 190 años de la taberna se reunió por primera vez en enero para crear conciencia sobre su importancia histórica y delinear una estrategia para que dure al menos una década más, hasta los 200 años.
La tarea no es fácil, considerando los costos crecientes y la amenaza constante de gentrificación, lamenta Ed Wendell, miembro del comité y director ejecutivo de la Sociedad Cultural e Histórica de Woodhaven.
Wendell dijo que las reuniones del comité han crecido desde sólo unos pocos a más de una docena de miembros de la comunidad. Su objetivo es aumentar el entusiasmo y el conocimiento del posible 200 cumpleaños de Neir en la próxima década.
“No estamos buscando estar abiertos por sólo 5 ó 10 años más. Estamos trabajando con nuestros clientes para encontrar una solución sostenible durante generaciones”, dijo a amNY el actual dueño del bar, Loycent “Loy” Gordon.
Gordon se convirtió en propietario en 2009, después de haber sido cliente durante años. No podía comprender un Queens sin este bar, así que cuando se hizo cargo del negocio, lo renovó y le puso el nombre actual.
Al igual que muchos miembros de la comunidad, Gordon dijo que él mismo se dejó atrapar por la historia y la conexión del bar con Woodhaven.
La taberna, que nunca ha cambiado de ubicación, se abrió por primera vez en octubre de 1829 con el nombre “The Blue Pump Room”, frente a una pista de carreras, actuando como un imán para los competidores habituales.
El nombre actual proviene de su anterior propietario, Louis Neir, quien lo compró en 1898 y lo amplió para incluir un salón de baile, una bolera y un hotel en la planta superior. En 1967 sus sucesores vendieron la propiedad y pasó a llamarse “The Union Course Tavern”.
El bar continuó disfrutando de una gran popularidad en el corto plazo e incluso apareció en películas como “Goodfellas” de Scorsese (1990). Pero a medida que pasaba el tiempo, se deterioró y entró en peligro de cierre.
Ciertamente ha variado de propietario y nombre varias veces durante las décadas posteriores, pero Wendell asegura que su brillo e importancia no han cambiado en absoluto.