La entrada para una casa ¿Dónde conseguir el dinero?
Un porcentaje cada vez mayor busca asistencia o préstamos de organizaciones sin fin de lucro o una agencia gubernamental
Uno de los obstáculos más duros cuando se trata de comprar una vivienda es el primero de todos: el pago inicial o entrada (down payment) que es un porcentaje del precio de la casa y no entra en la hipoteca.
Hay varios motivos. El primero porque no todo el mundo tiene la posibilidad financiera de para firmar un cheque con fuertes sumas de dinero. El segundo es porque hay una cierta confusión sobre cuánto debe ser este pago inicial y el tercero es porque no es del todo conocido que se puede pedir ayuda para ello.
Esto es lo que se deduce del estudio que ha hecho la Corporación Federal de Créditos Hipotecarios, Freddie Mac que revela que un tercio de las personas que tienen planes de comprarse una casa creen que tienen que dar una entrada de más de un 20% del valor total de esta. Con este porcentaje en mente, el 70% dice que tendrán que retrasar la compra y el 30% está seguro de que no podrá hacerlo nunca.
El hecho es que muchos de los contratos se pueden cerrar con una entrada que ronda el 10%. El año pasado, y según la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (NAR), el pago inicial medio fue del 13% y en el caso de quienes compraban por primera vez una casa del 7%.
Por supuesto, cuánto más se pague inicialmente menos dinero se deberá en la hipoteca y más bajas serán las cuotas mensuales de devolución pero si el problema no es el pago mensual sino la entrada, entonces considere que este ni siquiera es el porcentaje más bajo.
Para obtener créditos FHA, apoyados por la Administración Federal de la Vivienda, basta con poner un 3.5% del valor de la casa. Luego hay que pagar un seguro de impago y hay requisitos administrativos para que sea concedido pero es una salida viable para muchos primeros compradores.
De acuerdo a este mismo estudio, el 70% de los compradores sacar el dinero para hacer este pago inicial de sus ahorros, de una herencia, otros activos o incluso sacan dinero de la cuenta de jubilación, lo cual no es recomendable dada las varias penalizaciones que tiene esto antes de llegar a la edad de retiro.
El 31% consiguen el dinero después de vender otra propiedad, el 25% pueden contar con una donación o préstamo de familia o amigos.
Y dos fuentes de financiación que pueden ser inusuales o poco conocidas: el 16% usa una contribución que puede hacer el propio vendedor (que es una cantidad deducida del precio de venta). En estos casos hay que tener cuidado y contar con el asesoramiento de quien le conceda la hipoteca porque hay restricciones en préstamos FHA, por ejemplo.
Ayudas
Además un 10% ha pedido asistencia o un préstamo por una organización sin fin de lucro o agencia gubernamental. Esta es una vía cada vez más usada aunque la mayoría de los compradores no saben que existe. Se trata de programas para quienes compran por primera vez y suelen consistir en ayudas directas que no se han de devolver (grants), reducción de tasas en la hipotecas y préstamos para la entrada con ventajas en las tasas entre otras opciones.
Hay algunas instituciones con un programa de financiación que consiste en aportar una cantidad por cada dólar que sea ahorre con destino a un pago inicial. Suele haber límites y las instituciones que lo ofrecen le obligarán a hacer la hipoteca con ellos en vez de permitirle buscar el acuerdo que sea más adecuado para sus circunstancias.
Para poder participar de estos programas se tiene que tener una calificación crediticia de más de 620, la casa ha de ser la residencia principal y vivir en ella durante un tiempo determinado. Una de las tareas que se han de hacer y suele ser condición para estas ayudas es un curso de educación financiera.
Sitios en la web como Dow Payment Resource y la página del departamento de vivienda HUD además del FHA sobre programas locales de ayuda son los mejores caminos para evaluar las posibilidades. Normalmente un broker de hipotecas puede ayudarle a buscar el mejor programa que suele ser local.
El National Homebuyers Fund también le ayuda con los costos de la entrada o con los del cierre del contrato en un porcentaje que no supera el 5% del total de la hipoteca. La ayuda es un regalo o una segunda hipoteca a interés cero y que es perdonada después de tres años. Este programa no requiere que el comprador lo sea por primera vez, es flexible con la calificación crediticia y el ratio de deuda con respecto a ingresos.