Así es la historia de ‘Cita a Ciegas’, telenovela con Victoria Ruffo de Televisa y Univision
Una apuesta por bajar de peso desata la historia de esta comedia romántica
Victoria Ruffo está de regreso en las telenovelas con “Cita a Ciegas“, una comedia romántica en donde la actriz interpretará un personaje diferente. La nueva producción de Pedro Ortiz de Pinedo también cuenta con las actuaciones de Arturo Peniche, Omar Fierro, Sofía Garza y Gonzalo Peña.
HISTORIA
Lucía vive al límite, tiene más de 30 años, no tiene novio y pelea constantemente con la báscula. Su mayor problema no es su peso, es Maura (Ruffo), su mamá, quien lucha por mostrarle que así como está, y así como va, no va a llegar a ninguna parte.
Marina, hermana menor de Lucía se casa y la única preocupación de Maura es que Lucía llegue a la boda sola, vestida de negro y más gorda que nunca. Lucía acepta apostar con su mamá. Si ella gana, y llega a la boda de su hermana con una pareja “de verdad”, unos kilos menos y un vestido colorido, se acabará la presión, los comentarios y la continua intromisión de Maura en su vida, además de quedarse con la casa de su madre. Si Lucía pierde, se pagará una liposucción, para empezar a darle a Maura el gusto de verla cambiada.
Así comienza la cuenta regresiva, en donde cada cita será una oportunidad que Lucía no podrá dejar pasar. Tiene 258 días para encontrar el amor. Lucía periodista de carrera más no de profesión, trabaja en la revista “Entre Nos”, es la encargada de la sección de horóscopos, de la parte digital. Don Eduardo, dueño de la editorial y su hijo Lalo, ejercen presión para que Lucía acepte abrir un canal en donde vaya contando a manera de videoblog su camino para ganar la apuesta, tomando en cuenta que hay un número enorme de personas interesadas en la situación de Lucía, empezando por hacer que su voz cuente, sumado a la pericia de Marcelo como director de contenidos, “Entre Nos” empieza a ser lo que Lalo deseaba, y lo que Don Eduardo jamás se hubiera imaginado.
Lucía y Marcelo se conocen en la conferencia de Diego Musso, sin imaginar que ese primer encuentro desafortunado los convertiría en compañeros de trabajo y mejores amigos. Lucía se hace amiga de Naty, la pequeña hija de Marcelo y con quien siente afinidad desde el primer momento. Motivada por Bere a crear un perfil en una app para encontrar prospectos para sus citas, desde un mago, un contador rígido, un diseñador de modas, un gordo, el candidato ideal pero que en una situación de peligro corre dejándola sola. Así transcurren las citas de Lucía hasta que regresa a su vida Jorge Frutos, su exnovio y por el cual pone en riesgo cumplir la apuesta.
Otro de los elementos que está volviendo caótica la vida de Lucía es el regreso de Angelito, su padre biológico… Los días de Angelito están contados, padece una enfermedad terminal y en su carrera contra el tiempo por conseguir una relación firme con su hija, se encuentra con la amistad sincera de Salazar, esposo actual de Maura, y el amor de Alondra, la coqueta y locuaz mejor amiga de Maura.
Para Marina, el sueño de “familia ideal” que le ha pintado a Julián y a sus suegros preocupados en cuidar la reputación de su buen nombre y negocios, empieza a ser un caos. Por un lado es testigo de cómo su hermana lucha por ganarle a su madre la apuesta y por otro ve con claridad la obsesión de su madre por controlar y decidir su vida, vida que ella no escogió.
Otro personaje que vuelve para apoyar muy a su estilo a Lucía es Esther, madre de Salazar y quien siempre fue para Lucía como la abuela que no tuvo. A pesar de un cariño ampliamente correspondido, Marina se siente celosa por dicha preferencia, será más adelante cuando Esther le confiese que la quiere mucho sólo que ella no la necesitaba tanto porque siempre tuvo al lado a Maura y Lucía no tenía a nadie.
Lucía descubre al final que a veces hay que perder una apuesta para salir ganando.