Los economistas anticipan una recesión, solo discrepan sobre el cuándo
Trump afirma que no habrá crisis y que los consumidores tienen mucho dinero
El presidente de EEUU y su equipo económico están descartando que el ciclo económico de crecimiento vaya a acabarse y llegue una crisis. Los economistas de la National Association for Business Economics (NABE) tienen la opinión contraria están de acuerdo que la crisis está cerca pero están en desacuerdo sobre la fecha.
La mayoría de los técnicos en economía se inclina por 2020 pero crece hasta el 34% el porcentaje de los que consideran que podría ocurrir en 2021, tras las elecciones.
El cambio en la política monetaria por parte de la Fed ha cambiado la percepción de los economistas que ya en febrero de este año ponían fecha al fin de la expansión económica. La encuesta a los economistas de la NABE se hizo antes de que la Reserva Federal rebajara las tasas de interés pero cuando ya había señalado que lo podría hacer.
En total, el 88% de los economistas consultados creen que hay que estar preparado para ello porque llegará.
El hecho es que va a ser difícil prepararse porque el déficit presupuestario va a estar entre el 4.1% y el 4.7% del PIB en la próxima década y la deuda pública será del 78% del PIB en 2019, casi el doble que la media en los últimos 50 años.
Las rebajas fiscales aprobadas por el Gobierno conservador complican la posibilidad de un estímulo fiscal a la economía. El 27% de los economistas creen que hay pocas opciones en caso de una crisis.
EEUU, no será el único país en sufrir este frenazo en el crecimiento que ya está produciéndose. Los economistas temen que el Brexit sin acuerdo y la falta de un trato comercial de Washington con Beijing pueden complicar mucho el futuro a las economías desarrolladas.
Donald Trump dice que no ve que haya posibilidades de una recesión pero por otro lado no hace más que presionar a la Reserva Federal para que baje tasas de interés. Su asesor, Larry Kudlow, también desestimo los temores a una recesión aunque es algo que también hizo poco antes de la Gran Recesión, la mayor crisis en siete décadas.
Trump dijo ayer que no estaba preocupado porque “nuestros consumidores son ricos. Les he dado un tremendo recorte fiscal y están cargados de dinero (loaded up with money)”. También, como tantas veces hace, culpó a la prensa y al partido demócrata de dudar de la fortaleza de la economía.
La semana pasada se invirtió la curva de tasas de interés, algo que siempre ha precedido a una recesión.
El presidente dijo que los beneficios de Walmart, la gran cadena comercial conocida por sus bajos precios, apuntan a que el consumidor está fuerte y “eso es mejor que una encuesta o mejor que un economista”.