Baja de peso rápidamente y sin rebote, con la dieta del huevo cocido
Este plan alimenticio se basa en priorizar el consumo de proteínas, eliminar en su totalidad la ingesta de azúcares y disminuir los carbohidratos. El resultado es sorprendente en 15 días podrás bajar hasta 10 kilos
En la actualidad existen numerosas opciones de planes alimenticios para bajar de peso, cuando se trata de eliminar kilos extras efectiva, rápidamente y evitando el efecto rebote, las dietas proteícas son la mejor opción.
Las bases de esta dieta consisten en priorizar en todo momento el consumo de proteínas (se encuentran en alto contenido en el huevo), grasas saludables y minerales bajos en hidratos, esta combinación es la que promueve perder kilos de manera saludable y natural.
Es importante entender que las proteínas son macronutrientes fundamentales para el organismo, que como tal no podemos producir por lo que es indispensable obtenerlos de los alimentos. Después del agua el organismo se compone principalmente de proteínas, estas son el componente principal de nuestras células, músculos y tejidos.
Lo que hace que esta dieta funcione tan bien, es que lleva al organismo a un estado de cetosis; este estado se conoce por ser el estado metabólico en el que el organismo utiliza las grasas como principal fuente de energía.
Te presentamos los principios básicos para seguir al pie de la letra este régimen:
1. Elimina el consumo de azúcares y sal
Queda prohibido el consumo de alimentos elaborados con azúcares agregados entre los que destacan: dulces, pasteles, refrescos, bebidas con altos contenidos de azúcar como jugos, bebidas energéticas o cafés enlatados, galletas, entre otros. También es importante controlar el consumo de sodio, evitando las papas fritas, frituras, embutidos y comidas procesadas.
2. Aumenta el consumo de huevos y proteínas
La principal recomendación de este régimen es aumentar el consumo protéico, por lo que deberás integrar:
- Desayuno: Como base de los desayunos integra una porción de frutas cítricas, dos huevos cocidos, de 1-2 rebanadas de pan tostado integral y una taza de té verde, cualquier infusión natural o café.
- Comida: Como base de las comidas integra vegetales mixtos al gusto (pueden ser en ensalada, al vapor o a la plancha) y un corte de pechuga de pollo o pescado.
- Cena: Como base de las cenas integra una ensalada rica en antioxidantes con vegetales mixtos y de hoja verde e integra proteína al gusto puede ser huevo cocido, pollo o atún. Condimenta con aceite de olivo extra virgen.
Ensalada saludable con proteína./Foto: Archivo
3. Bebidas permitidas y niveles correctos de hidratación
En este régimen es indispensable mantener los niveles de hidratación óptimos, considera la ingesta de 1.5 a 2 litros de agua al día. Entre las bebidas permitidas se encuentran infusiones naturales como la de manzanilla, jengibre, menta, té verde y una taza de café por la mañana. Evita el consumo de jugos (aunque sean naturales), bebidas gaseosas, refrescos y alcohol.
Hidratación. /Foto: Shutterstock
4. Elimina los carbohidratos
Para conseguir los resultados planteados es importante que limites al máximo el consumo de carbohidratos, entre los que destacan: harinas refinadas, pan dulce, bollería y cereales enteros. Puedes consumir en una de tus comidas del día de 1-2 rebanadas de pan 100% integral.
5. Consume frutas cítricas
Esta recomendada la ingesta de frutas especialmente las que tienen alto contenido en vitamina C, los cítricos. Puedes consumir una porción en la mañana e integrarlas como parte de tus colaciones; están principalmente recomendadas: naranja, toronja, lima, pomelo, piña, fresas, frambuesas y uvas.
6. Aumenta y exagera con el consumo de vegetales
Debido a la ausencia de carbohidratos, es normal que tengas algunos episodios de hambre o antojos durante los primeros días. Es indispensable que aumentes el consumo de vegetales deberás de integrarlos como parte indispensable de las comidas y cenas, pueden ser en forma de ensalada o a la plancha; también son una excelente opción de colaciones entre comidas.
La recomendación es realizar esta dieta durante 15 días seguidos, procurando seguir sus principios básicos, aumentando la ingesta de líquidos, realizando actividad física regularmente y procurando dormir 8 horas al día. Sus resultados varían según la persona, en general se estima una pérdida de peso de entre 5-10 kilos. Es de vital importancia posterior a la dieta, seguir con una alimentación balanceada y nutritiva para continuar con los resultados positivos que genera un cambio de hábitos y costumbres.