La estafa del cheque, ¿Qué tiene que saber?

Hay quien huye de compras y finanzas en Internet para evitar que ciberpiratas se hagan con sus datos, su identidad, sus cuentas o con todo ello.

Pero en el mundo no virtual también hay que mantener la vigilancia y cuestionar la sensación de seguridad que se tiene con todo lo que esté impreso y se pueda tocar. El motivo es que no es oficial todo lo que parece que lo es.

Es una advertencia del Fondo de Garantía de Depósitos bancarios (FDIC en sus siglas en inglés) desde donde se explica que las cada vez más sofisticadas tecnologías gráficas y de impresión están permitiendo a los estafadores hacer réplicas de cheques de banco en apenas minutos. El resultado de la copia es tan bueno que no solo confunde al cliente sino también a los propios empleados de banca.

¿Cómo funciona?

Los cheques los usan los estafadores cuando quieren que usted, por ejemplo, cobre o deposite este medio de pago falso. Le contarán una historia para que lo haga, como que es un premio por algo o una oferta de trabajo que viene con un pago inicial.

¿Para qué?

Una vez que usted lo deposita en su cuenta bancaria le van a pedir que mande parte o toda la cantidad de dinero de ese cheque a ellos o a otra persona o institución (un cómplice) con mucha urgencia. Le dirán que son los impuestos del premio o un sobrepago equivocado de ese salario inicial. La prisa viene de que cuando el banco procese el cheque en 24 o 48 horas este se revelará falso pero el estafador ya tendrá el dinero de la víctima.

¿Cómo pide el timador que envíe el dinero?

Con una tarjeta de prepago o de regalo, mediante un pago electrónico o incluso con un cheque personal suyo.

¿Qué pasa cuando se verifica que el cheque es falso?

Usted lo ha depositado o cobrado luego usted es responsable. Los fondos que ha enviado al timador es responsabilidad suya o dinero suyo.  

Pero, ¿Cómo cae alguien en esto?

Hay varios guiones para este fraude y posiblemente incontables variantes sobre ellos. Todos ellos tienen como elemento común que hacen presa de personas de buena voluntad con poca malicia y muy inocentes o asustadas como para creerse historias casi imposibles.

EL FDIC advierte sobre la posibilidad de que alguien le diga que han ganado una lotería en el extranjero o recibido una herencia pero que antes de recibirla tiene que que pagar impuestos y comisiones. El estafador manda un cheque falso con la herencia o el premio y advierte que antes de recibir el dinero debe enviar estos costos fiscales o de gestión.

Por supuesto se pagan impuestos y comisiones por nada porque no hay lotería ni herencia. El cheque es inválido.

Otra de las tramas incluye una compra o el pago de un servicio con un cheque que es de más valor de lo que se pide en la transacción. El  comprador o estafador hace ver que hay un error en el cheque y pide al vendedor o estafado que se le mande un giro por el exceso de pago. Ese es el dinero que nunca más verá el estafado porque el cheque es falso.

Y ¿Cómo saber que el cheque es falso?

El FDIC pide que los clientes se aseguren que el emisor es un banco legítimo. Si el nombre de la entidad suena muy raro, busque en Internet el rastro. Siempre en páginas oficiales. El propio Fondo tiene un listado de bancos del país.

Si aún le queda dudas, llame al banco. Pero no use el teléfono que pueda venir impreso en el cheque sino en el de la página oficial de la entidad. Pida que verifiquen el cheque, algo para lo que necesitará el número de cheque, el día de emisión y la cantidad.

Normalmente los documentos oficiales tienen marcas de seguridad y al agua además de tintadas que cambian de color entre otras medidas de seguridad. Los estafadores las intentan replicar pero es difícil que lo hagan bien.

Y por último, si el cheque es de una cantidad mayor de la que le dijeron: desconfíe. Si el cheque viene de un lugar distinto del que esperaba: desconfíe. Si la historia que le han contado es demasiado bonita para ser verdad — de verdad–, desconfíe. La realidad financiera no se parece a las películas de sorprendente final feliz.